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Luis César medita hacer cambios ante el Huesca

Jesús Pérez Baraja

Después de un inicio de semana marcado por la lesión de larga duración de Deivid Rodríguez y las pruebas de Luis César Sampedro en busca de una solución ante un posible contratiempo a mayores en el centro de la defensa, el entrenador del Real Valladolid ha cambiado el registro en el entrenamiento de este miércoles, último a puerta abierta antes del duelo ante la SD Huesca.

 
Tras varios rondos y ejercicios a espacio reducido, el técnico dividió al grupo en dos equipos para trabajar el balón parado en el tramo final de la sesión, repartiendo petos a futbolistas que podrían formar un posible once ante el conjunto oscense este viernes. Ocho de ellos repetirían respecto al encuentro de Granada, mientras que habría tres novedades. Una, la obligada de Kiko Olivas por Deivid. Por otra parte, Borja Fernández recuperaría el puesto tras cumplir su sanción en detrimento de Anuar Tuhami. Además, Javi Ontiveros entraría en el lugar de Óscar Plano.
Estos hipotéticos cambios pueden estar en la mente del técnico que, a pesar de ello, últimamente no suele dar demasiadas pistas. Sin ir más lejos, la semana anterior, el gallego escondió la titularidad de Giannis Gianniotas en el Nuevo Estadio de Los Cármenes. El jueves, el equipo trabajará a puerta cerrada en el Nuevo Estadio José Zorrilla y, posteriormente, Luis César comparecerá ante los medios de comunicación, momento en el cual podría despejar dudas.

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