El árbitro más casero de Segunda pitará en La Romareda

El colegiado castellano-manchego Dámaso Arcediano Monescillo será el encargado de dirigir el encuentro que disputará el Real Valladolid frente al Real Zaragoza en la cuadragesimoprimera jornada de LaLiga 1|2|3, que tendrá lugar este domingo a partir de las 20.30 horas en el Estadio de La Romareda, en lo que será su tercer partido pitando al Pucela esta temporada tras la derrota (1-0) en Tarragona que supuso la destitución de Luis César Sampedro y el empate (2-2) contra el CD Lugo en el Nuevo Estadio José Zorrilla en el que señaló dos penaltis favorables al conjunto blanquivioleta que propiciaron la remontada y expulsó al central gallego Bernardo Cruz.

 
En su séptima campaña en Segunda División, será el décimo encuentro que el puertollanero arbitre a los vallisoletanos, después de dos triunfos en Alcorcón (0-1) y Vitoria (0-2) hace tres campañas, y otros dos ante el Villarreal CF B (2-1) y en Elche (1-2) en la 2011/2012, temporada del ascenso con Miroslav Djukic.
En la difícil 2015/2016 dirigió la derrota (3-0) en Ponferrada, en la que expulsó a Juanpe Ramírez por doble cartulina a los pocos minutos y pitó el penalti que supuso el primer gol del hat-trick que anotó Yuri de Souza, y la gran victoria (2-4) en el Nuevo Estadio Carlos Tartiere ante el Real Oviedo, en uno de los mejores partidos del conjunto blanquivioleta en una triste campaña. En la pasada solo arbitró la derrota (1-0) en Santa Cruz de Tenerife, en la que no expulsó al chicharrero Jorge Sáenz, que agarró y derribó a Álex López cuando el gallego se marchaba solo a portería.
A los aragoneses les ha dirigido en 11 ocasiones con un balance de cinco triunfos, dos empates y cuatro derrotas. En el curso actual ha arbitrado 21 enfrentamientos que terminaron con 14 victorias locales, cinco empates y dos triunfos visitantes, acumulando 10 victorias consecutivas para los equipos de casa desde el mes de diciembre, lo que le convierte en el colegiado más casero de la categoría. Hasta el momento ha mostrado cuatro tarjetas rojas y tiene una media de 5,6 cartulinas amarillas por encuentro.