Borja Herrera fue de los primeros en despedirse. Tenía muy claro que su etapa en el Nuevo Estadio José Zorrilla era pasajera. Unos pocos meses y vuelta a la Unión Deportiva Las Palmas. Por ello, después de la celebración del ascenso, el lateral izquierdo escribió unas líneas para decir adiós al equipo blanquivioleta. Todo, después del recuerdo del ascenso que, unido al partido ante el Real Zaragoza, es el único buen recuerdo de esta etapa.
Con apenas cinco partidos en la mochila blanquivioleta y sólo 361 minutos en la piernas, Borja Herrera se va con la sensación clara de que una de las opciones con las que aceptó esta oportunidad se ha cumplido con creces.
En el pasado mercado invernal, Ángel García abandonaba Pucela. La extraña situación del puesto de lateral zurdo en el Real Valladolid podía condicionar su llegada, como así fue. Con Nacho Martínez olvidado y Javi Moyano alternando posiciones, Borja Herrera era una opción más. Parecía que llegaba para que el Club se pudiera cubrir las espaldas, como así terminó siendo ya que, en determinadas fases de la temporada, fue el tercer lateral zurdo del equipo.
Así, con un duro camino por delante, la etapa del jugador ha sido complicada. Pese a que generalmente siempre ha sido una opción de banquillo, el grancanario no fue una alternativa real ni para Luis César Sampedro ni para Sergio González. Por ello el duelo en el Estadio de La Romareda es el mejor recuerdo del jugador en esta etapa.
En aquella derrota (3-2) ante el equipo de Natxo González, Herrera suplió a un Nacho ya reintegrado en el grupo y en el once. No era una tarea fácil ni, sobre todo, un partido sencillo. Pese a todo, su rendimiento fue excelso. En defensa y en ataque, Borja firmó un duelo brillante. Fue una aportación para tenerle en cuenta de cara a la próxima temporada en su regreso a Las Palmas. Él sabía que volvería y, en el fondo, ya había asumido que sería para jugar en LaLiga 1|2|3.
Con pocas oportunidades, Borja nunca bajó el nivel en su puesto. Supo rendir, competir y cumplir las expectativas que dejaba. Recordando, nuevamente, su duelo en Zaragoza, el '3' aprueba su paso por Valladolid.