El próximo jueves, el Real Valladolid presentará ante los medios de comunicación en el Hotel Gareus de la capital castellana la campaña de abonados para la temporada 2018/2019 en la que el conjunto pucelano volverá a competir en Primera División cuatro temporadas después.Lo más destacado de la misma es el aumento que sufren los precios respecto a la última campaña en la máxima categoría del fútbol español, exceptuando para los 9.013 aficionados que no pagarán por su carnet tras el ascenso del equipo, y para los 716 a los que se les mantendrá el precio tras aprovechar el periodo incentivado el pasado verano.
Teniendo en cuenta la 2013/2014, última en Primera, las cifras se incrementan en un 10%, mientras que si se toma como referencia la 2012/2013, que hasta la fecha era la que tuvo los precios más caros, los actuales también ascienden en un 4%. Comparándolos con los de la temporada pasada en LaLiga 1,2,3, el aumento es mucho superior, aproximadamente de un 35%.