José Anselmo Moreno
Valladolid, 14 nov .- Es la mutación de un excluido, de un suplente atormentado, el lateral del Valladolid Nacho Martínez, que hoy ha escenificado en rueda de prensa la renovación contractual por tres años, veía hace meses los partidos desde el sofá de su casa, ni siquiera iba convocado, y hoy es una de las estrellas del equipo.
La historia tiene poco de normal. Su exentrenador, Luis César Sampedro, nunca le explicó la razón de su marginación y, en aquel momento, reconoció que esa situación la llevó mal, al punto de "centrifugar" en exceso sus pensamientos.
"Ves que entrenas y entrenas, no llega la oportunidad y la cabeza te juega malas pasadas, pero nunca supe qué hice mal", subrayó en el momento de su reaparición y todavía un poco convaleciente.
Hoy todo era distinto y en la rueda de prensa sobre su renovación mostraba su alegría, incluso acertó a definir con solo una palabra lo que ha pasado: "Positividad", dijo sin vacilar.
"Al final conseguí ver la parte buena, siempre tienes que ver el lado bueno de las cosas, todo sirve para aprender porque un día puedes estar arriba y otro, abajo", subrayó ante los periodistas.
Nacho estuvo incluso a la sombra de un jugador fuera de su puesto, Javi Moyano, también de Ángel García o de Borja Herrera, y llevó con abnegación la etiqueta de "desaparecido" pese a que nunca iba convocado, ni cuando estaban de baja todos los laterales zurdos.
Tuvo que hacer un ejercicio de paciencia o resignación notables y sólo su empuje racial y mantenerse "indesmayable" en el trabajo diario, como reconoció hoy, le permitió mantenerse a flote en los peores momentos. Fue una especie de "depresión deportiva" y una muestra de que de eso también se sale.
Cuando todo estaba en contra, apareció el entrenador Sergio González y le preguntó si seguía siendo el jugador que él recordaba del Rayo Vallecano. Hablaron, sólo hablaron, y le dijo que aún rememoraba su juego en Vallecas: "Cógete esos vídeos, tienes velocidad, centras bien, eres muy bueno". Esas frases reforzaron la confianza del jugador y todo viró hacia la situación actual.
José Ignacio Martínez García (Madrid, 7-3-1989) pasó a ser una de las estrellas del equipo en la recta final de la pasada temporada y qué no decir de esta, donde se ha llegado a reclamar desde Valladolid su internacionalidad e incluso hoy habló de ello: "Es muy difícil pero sería un sueño para mi", precisó.
El lateral madrileño soltó un partido épico ante el Levante, con un golazo para enmarcar que hizo que Ronaldo Nazario se llevase las manos a la cabeza en el palco y que, probablemente, esté entre los tres mejores de toda la liga en lo que va de ejercicio.
Ha ido creciendo y agrandándose su figura hasta que ayer el Real Valladolid y los representantes de Nacho Martínez alcanzaron un acuerdo para ampliar el contrato del futbolista hasta 2022.
El defensa ha pasado de ver los partidos en casa a renovar por tres temporadas más y tener la cláusula más alta en la historia del club, 18 millones de euros, algo que calificó hoy de "mera anécdota"
En la presente campaña, Nacho ha disputado todos los partidos y todos los minutos de juego en LaLiga Santander. Al dotarle de la condición de titular, Sergio eligió el camino de la "justicia futbolística" y ha permitido a este futbolista ya de 29 años, siempre modesto, poner una rúbrica notable a su carrera.
De carácter alegre, Nacho sale del vestuario gastando bromas pero esto no era exactamente así cuando su "demarcación" estaba en la grada ya que, pese a haber remontado la situación, se llevaba las decepciones a casa mientras esperaba "un abrazo" de la fortuna.
Esta historia sólo es una de las cosas que están pasando en un club donde ahora se aplaude a quienes eran silbados, donde hay jugadores que estaban marginados y que ahora vuelan, incluido un Toni Villa que precisamente tiene recelo a volar (en avión).
Todo ha cambiado, son los altibajos habituales en el fútbol y en el día a día de cualquier contexto aunque ello demuestra que el vigente Real Valladolid es un equipo muy vivo y, además, séptimo en la tabla. La mutación de Nacho acabó llegando a todos.
Con este articulo de José Anselmo esta dicho todo,los entendidos entenderan y los neofitos se lo pensarán gracias. SIEMPRE PUCELA.