Miguel Ángel Gómez, sin sitio en el palco de La Balastera
El Estadio Nueva Balastera de Palencia se quedó pequeño para albergar el partido amistoso entre el Real Valladolid y el Real Sporting. No en la grada, que aún así presentó una gran imagen con una entrada cercana a los 4.000 espectadores. Pero sí en la zona de prensa, desbordada, y en el palco.
Sergio González tomó la decisión, como hace un año, de prescindir de los jugadores más importantes de cara a reservarlos al último amistoso...y al primer partido de LaLiga frente al Real Betis. Eso llevó a muchos de los jugadores no convocados a acercarse a Palencia para ver a sus compañeros. Allí estuvieron Kiko Olivas (con su familia), Míchel Herrero, Nacho Martínez, Antoñito Regal Rubén Alcaraz, Óscar Plano, Sandro Ramírez y Federico Barba.
La comitiva de despachos, con David Espinar, Mat Fenaert y Miguel Ángel Gómez llegó poco antes que la mayoría de los jugadores. En apenas unos minutos el palco se llenó y se quedó sin sitio para los últimos futbolistas, caso de Sandro o Fede Barba. Fue entonces cuando el director deportivo del Real Valladolid se levantó y cedió su sitio al grancanario para terminar viendo el partido...desde las escaleras.
Por La Balastera también se dejaron ver miembros de la secretaría técnica e incluso el greenkeeper del José Zorrilla, Antonio Blanco García del Pino.