Nacho Martínez, un futuro asegurado y un ídolo definido

Tras ver el rendimiento de Fede Barba en los partidos en los que Nacho Martínez ha estado lesionado y tras la exigencia de Sergio González con el futbolista italiano, la realidad dice que el '22' será de la partida ante el Sevilla FC este domingo. El madrileño recuperará la titularidad y superará un momento que para él es nuevo con Sergio en el banquillo del Real Valladolid.

El ex del Rayo Vallecano nunca había sido suplente con el entrenador catalán en un encuentro liguero, pero en la visita y derrota (3-0) ante el Deportivo Alavés le tocó esta sensación de la que ahora quiere olvidarse en el importante encuentro de este domingo, desde las 21.00 horas, contra el equipo de Julen Lopetegui.

El futuro a corto plazo del futbolista es el conjunto hispalense. Es el importante y el que más le preocupa. La tensión por el duelo es alta. El equipo debe ganar y olvidar el último duelo. A Nacho le preocupa la respuesta ante un rival de la entidad del andaluz casi más que el futuro que pueda tener cuando cuelgue las botas.

Futbolista hasta 2022... como poco

Éste no le inquieta tanto porque parece que lo tiene solucionado o, al menos, eso pareció quedar claro cuando selló su renovación con el Real Valladolid hasta el año 2022. En la rueda de prensa posterior a la firma, el madrileño recibió constantes elogios de un Miguel Ángel Gómez que fue rotundo con el futuro del jugador. "Lo digo en serio, Nacho va a trabajar conmigo", aseguró Gómez hace algo más de un año.

En el equipo en el que esté, en la etapa en la que sea y en el puesto en el que le toque, Gómez quiere contar con un jugador que es un "ejemplo" para los más jóvenes y que siempre ha valorado y destacado el sacrificio del futbolista profesional.

En un deporte en el que sólo se valora los aspectos positivos, Nacho cree que sólo interesa "la punta del iceberg", como confesó en febrero a los jugadores de la cantera del Pucela. Los esfuerzos y sacrificios del fútbol profesional son muy altos y el jugador los tuvo que realizar al renunciar, por ejemplo, a una carrera universitaria.

El lateral zurdo inició esta etapa, pero tuvo que dejarla por aprovechar la opción de un sueño que le ha llevado ya a vivir 113 partidos en LaLiga Santander y a conseguir de la mano del Real Valladolid el primero de sus dos grandes sueños como profesional. Si su gran ilusión es debutar en Champions League, la ambición de firmar un ascenso a la élite del fútbol español la consiguió hace dos veranos como blanquivioleta.

Tras un año complicado y un tira y afloja en el que perdió con Luis César Sampedro, la llegada de Sergio González cambió la carrera y la etapa en Valladolid de un jugador con mucha memoria. "El futbolista está muy bien visto y gana mucho dinero, pero hay que valorar las pequeñas cosas que te han llevado allí y no olvidarlas", aseguró en una charla. Es por ello que él siempre recuerda sus inicios, sus esfuerzos y sus apoyos en los peores momentos.

Una referencia clara

En esos momentos complejos y duros, Nacho siempre creyó en sus posibilidades. No tuvo problema en hacer las maletas, salir de casa y buscar nuevos horizontes. Sin olvidar su amor por Madrid y el encanto de la ciudad que le vio nacer y que le ofreció la oportunidad de determinar a su gran ídolo.

Como lateral izquierdo de largo recorrido, Nacho Martínez siempre vio en Roberto Carlos a un reflejo y un espejo. El brasileño, gran amigo del ahora presidente del Pucela, es el ídolo de un '22' al que aun le quedan, como poco, dos temporadas en Valladolid.

En ellas, muy posiblemente, esté Sergio, su gran valedor sobre el terreno de juego y al que le queda muy poco para firmar su renovación, y quizás Miguel Ángel Gómez, aquél que ya le tiene reservado un puesto para su futuro, cuando Nacho decida colgar las botas.