En la mañana de este jueves, el Real Valladolid oficializó la renovación de Sergio González como entrenador por dos temporadas más, hasta junio de 2022. Pero el técnico catalán no es el único que amplía su vinculación con el club pucelano, sino que también lo hacen dos miembros de su cuerpo técnico.
Un equipo de trabajo que ahora está compuesto por tres personas. A Diego Ribera, segundo entrenador, se ha unido Sergio Dorado, preparador físico. Este último llegó a la entidad en el verano de 2018, después de que el conjunto pucelano ascendiera a LaLiga Santander. En un principio, su fichaje se debía a la idea de pasar de tener un preparado físico a contar con dos. Sin embargo, la falta de acuerdo entre Fran Albert y el Club para ampliar su contrato, propició que Dorado, de la noche a la mañana, se convirtiera en el máximo responsable en ese área.
Cuando en septiembre de 2018 Sergio renovó, lo hizo únicamente junto a Diego Ribera. Poco más de un año después, tras superar sus primeros meses en el Pucela y convencer su trabajo a Sergio, Dorado ya ha entrado a formar parte del cuerpo técnico del ex del RCD Espanyol.
No así el preparador de porteros, José Manuel Santisteban, al que ya se le considera un hombre de la casa tras cumplir cuatro temporadas en la entidad blanquivioleta. El exguardameta llegó en el verano de 2015, a la vez que Gaizka Garitano, pero permaneció en el Real Valladolid a pesar de que el entrenador vasco duró tan sólo nueve jornadas en el banquillo del Nuevo Estadio José Zorrilla.
✍🏻😊💜 Diego Ribera y Sergio Dorado también amplían su contrato con el Pucela hasta 2022 ¡Enhorabuena!#pucela #RealValladolid pic.twitter.com/eA8rGI8GRY
— Real Valladolid C.F. (@realvalladolid) 5 de diciembre de 2019