El partido entre el CD Leganés y el Real Valladolid de la Jornada 28 en LaLiga Santander (que nunca se ha jugado, de momento) acabó con victoria virtual de los madrileños para unos y otros... y con empate para Loterías y Apuestas del Estado y, por lo tanto, para el boleto de La Quiniela.
Y es que tal y como estaba previsto, el signo del encuentro entre pepineros y pucelanos se decidió por sorteo, según se establece en la normativa ante un partido aplazado o suspendido:
a) Se decidirán por sorteo, a efectos exclusivos del concurso, los resultados de los partidos no computados en la jornada, aunque en tal caso se encontraran los 15 partidos del boleto.
b) El sorteo de los partidos sujetos a este sistema se efectuará por su orden correspondiente. Para cada uno de ellos se introducirán en un bombo 100 bolas.
c) Estas bolas serán de los colores rojo, azul y amarillo. Una bola roja indicará la victoria del equipo consignado en primer lugar del encuentro sorteado. Una bola azul indicará el empate. Una bola amarilla indicará la victoria del equipo consignado en segundo lugar.
d) El número de bolas de cada color corresponderá a los tantos por ciento de los signos pronosticados por los participantes, en cada uno de los partidos no computados en la jornada, registrados en el sistema central, redondeando por exceso o por defecto los decimales. Loterías y Apuestas del Estado, previamente a la realización del sorteo, dará a conocer los tantos por ciento de los signos pronosticados por los participantes en cada uno de los partidos no computados en la jornada por los medios públicos a su alcance.
El azar ha podido dejar esa X, a pesar de que no era el resultado más probable. Y es que, para esa casilla 1, el 52% de los quinielistas apostó por la victoria del conjunto pepinero, el 30% por el empate y el 18% por un triunfo pucelano. De cara al sorteo esto se traduce en la existencia de 52 bolas con el signo 1, 30 bolas con el signo X y 18 bolas con el 2.