Fútbol sin tensión (Capítulo I)

El Real Valladolid está salvado ya al 100%. La derrota (2-0) del RCD Mallorca en el Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán confirmó lo que es un "éxito" para Sergio González. Con la continuidad en LaLiga Santander, el Pucela viista el Estadio de Ipurúa para enfrentarse a la SD Eibar en lo que va a ser el primero de los dos encuentros relajados que vivirá el equipo blanquivioleta.

El clima distendido que se va a vivir en el duelo lo confirma el hecho de que es el único encuentro fuera del horario unificado de esta penúltima jornada. Pese a lo destacado de ser un encuentro fuera de la base de la jornada, la noticia no está en la hora sino en los condicionantes con los que viaja el Real Valladolid hasta tierras vascas.

Convocatoria corta, oportunidades grandes

Con sólo 19 jugadores en la convocatoria y un importante número de bajas, el duelo está marcado por la oportunidad para jugadores con menos minutos y ciertos activos del filial. Pese a que el Club mira con un ojo al play off del Promesas en Andalucía, el Real Valladolid quiere mantener intacta su buena imagen de la temporada.

Sergio no quiere perder la "esencia" de su Pucela bajo ningún concepto y pretende hacerlo bajo este once que vislumbramos desde ElDesmarque Valladolid:

Nombres como José Antonio Caro, Antoñito Regal, Matheus Fernandes o Toni Villa tendrán grandes oportunidades en estos dos últimos encuentros y, por ello, Éibar no será menos y ofrecerá un once titular novedoso, pese a que no vaya a tener en su idea ningún jugador del filial.

Con todo, el Real Valladolid tiene un encuentro sin carga emocional ni estrés competitivo pero sí una nueva oportunidad de seguir demostrando su profundidad de armario y todo ello se resume en el primer capítulo de una versión del fútbol sin tensión, algo que el club pucelano ha vivido en sólo un partido en los últimos cuatro años y que ahora quiere disfrutar con toda su fuerza.