Otra de las sinergias que necesita Sergio González

Son ya varias las ocasiones en las que Sergio González ha hablado de la necesidad del Real Valladolid de encontrar la sinergia defensiva que tanto ha marcado las dos temporadas anteriores del equipo en LaLiga Santander. La unión entre Kiko Olivas y Fernando Calero en la primera campaña y la de Kiko Olivas y Mohammed Salisu en la segunda son el sueño que, ahora, busca repetir el entrenador catalán.

Desde ElDesmarque Valladolid hemos preguntado a nuestros lectores cuál es su apuesta para el centro de la zaga y, ahora, repetimos la pregunta aunque con diferentes protagonistas y un frente muy diferente: el ataque.

El Pucela no está bien en defensa y, tampoco, en la delantera. Sin una pareja fija para el frente ofensivo, Sergio debe encontrar también una unión que lidere el ataque. Buscando esa mejora y crecimiento, la primera cuestión llega por el sistema.

Si en otros años el sistema con un enganche y un único delantero era una formación descartada por el cuerpo técnico, este temporada está muy presente en la mente de Sergio González y sus ayudantes.

La llegada de Fabián Orellana y el cambio de rol de Toni Villa han posibilitado una variación de esquema interesante que no deja atrás la opción de jugar con dos delanteros. Hasta la expulsión de Nacho Martínez ante el Deportivo Alavés, el Pucela formaba con Sergi Guaridola y Shon Weissman. Esa pareja de delanteros con vitola de titular se estrenaba de inicio en un partido, pero sólo duró unos minutos.

Sin opción de poder confirmar qué ofrece la unión entre el de Jumilla y el israelí, el Real Valladolid se encuentra en un debate interno importante. Los malos resultados, el farolillo rojo que ocupan los pucelanos y el "déficit" de jugadores para el once titular marcan una actualidad que invita a que se encuentre la "sinergia" defensiva que quiere Sergio y la ofensiva que necesita el equipo.