La nueva inercia de Mohammed Salisu
En algo más de tres años, la carrera de Mohammed Salisu ha cambiado mucho. El ghanés, actual jugador del Southampton FC, debutaba con el filial del Real Valladolid en enero de 2018 y con el primer equipo en enero de 2019. Su debut en LaLiga Santander llegó en agosto de 2019. Fueron muchos cambios para el jugador africano y la venta más elevada en la historia blanquivioleta.
La carrera del ghanés ha variado mucho y muy rápido en poco tiempo y, posiblemente, le hizo llegar a la Premier League lejos del nivel competitivo y físico que pide un liga como la inglesa. Por ello, y pese a ser una de las grandes sensaciones de la última edición de la competición española, el exblanquivioleta no tenía la confianza de Ralph Hasenhüttl, su nuevo entrenador. Pasaban las jornadas, las semanas y los meses y Salisu no debutaba.
Era un periodo de adaptación, marcado por diferentes dolencias físicas, muy largo que no le dejaba casi ni entrar en las citaciones. La dinámica era muy negativa, pero ésta ha cambiado en las últimas semanas. Tras debutar en la FA Cup el pasado día 11 ante el Wolverhampton Wanderers, Mohammed Salisu suma 288 minutos en 13 días.
Dos titularidades en Premier
Disputando integro el duelo copero, tres días después debutaba en la Premier League con 18 minutos ante el propio Wolverhampton. Desde ese día 14, el ghanés ha sumado dos titularidades más en dos muy buenos encuentros. Siendo elegido mejor jugador del partido ante el Chelsea FC, el exjugador blanquivioleta se encuentra en un gran momento.
Salisu ha conseguido cambiar su tendencia y se ha ganado un hueco en el equipo. Aprovechando la mala situación de un Southampton FC que sólo ha ganado un punto de los últimos 24, el africano tiene en su mano hacerse con un puesto de titular en el equipo de forma inesperada.
Ver al africano como titular en una dinámica repentina no sería algo nuevo porque es la situación que le acompañó la temporada pasada cuando fue titular en el Estadio Benito Villamarín del Real Betis. Desde entonces, nunca salió del once titular de Sergio González hasta convertirse en la venta más cara de la historia del Real Valladolid.