Hace unas semanas, Sergio González aseguraba que algo habrían "hecho bien" cuando el Real Valladolid estaba fuera de descenso. La realidad deportiva hablaba de un equipo en caída libre de juego, pero, con todo, el entrenador se centraba en la clasificación, aquélla que puede regalar al equipo una gran alegría tras su paso por Vigo.
El empate (1-1) entre la SD Éibar y la SD Huesca y la derrota del Deportivo Alavés ante el CA Osasuna lleva a que los pucelanos se encuentren antes de visitar al RC Celta de Vigo con una inmejorable oportunidad. Ciertamente, éste ha sido un término que ha estado muy vinculado al equipo de Sergio esta temporada y es por ello que el viaje a Galicia es, además de inmejorable, la enésima opción de dar un golpe sobre la mesa.
Ganar en Vigo es capital, pero hacerlo tras los resultados de la jornada, una muestra de autoridad que podría ser definitivo para las aspiraciones pucelanas. Pese a haber vencido sólo en un partido en los últimos 11 ligueros, la situación de LaLiga Santander hace que el Pucela pueda salir de los tres últimos puestos con una victoria en el Estadio Abanca-Balaídos.
El objetivo es tan claro como ilusionante y el equipo lo afronta con la recuperación de dos jugadores, pero, también, con la pérdida de Waldo Rubio. Sin el '23', pero con una lista de 22 futbolistas convocados, lo más destacado del once por el que apostamos desde ElDesmarque Valladolid es la suplencia de Rubén Alcaraz y el regreso de Lucas Olaza.
La continuidad de Shon Weissman en el banquillo puede volver a ser otra gran novedad del Real Valladolid. En esta ocasión, y bajo el arbitraje del colegiado catalán David Medié Jiménez, los protagonistas son los menos destacados porque el equipo tiene la oportunidad de una victoria que, pese a todo lo vivido y acumulado, sacaría a los pucelanos del descenso. Una lujosa oportunidad que saber leer en cualquier aspecto y contexto.
Siempre vendiendo humo le odio