La plantilla del Real Valladolid se ejercitó este miércoles con novedades en el césped del Campo 1 de los Anexos. La principal de ellas, la presencia de público casi tres meses después, que acudió a la primera sesión de la semana a puerta abierta.
Con trabajo al margen para el tocado Josema Sánchez y los lesionados Waldo Rubio y Hugo Vallejo, estuvieron ausentes Óscar Plano y Pablo Hervías. Una vez que el protocolo y control diario de LaLiga acerca del coronavirus ya no tiene vigencia desde hace semanas, el club pucelano ha tomado la decisión de no informar de los casos de covid-19 que, a partir de ahora, surjan en el vestuario. Por lo tanto, no se decarta que alguno de éstos se encuentren aislados en sus domicilios por este motivo.
En una intensa sesión bajo la calima que contó con los futbolistas del Real Valladolid Promesas Samu Casado y Víctor Narro, y que duró poco más de una hora, los blanquivioleta realizaron trabajo de gimnasio de inicio. Posteriormente, saltaron al césped para llevar a cabo el clásico partido de entrenamiento semanal en el que José Rojo, Pacheta no dio demasiadas pistas, al mezclar los jugadores disponibles.
La intensidad fue la gran protagonista, con alguna que otra entrada fuerte y golpes que, aunque supusieron la atención del cuerpo médico, no revistieron mayor gravedad.