Pezzolano cumple un año en el Real Valladolid: descenso, gestión de plantilla, limpieza de vestuario, lejos del ascenso directo...

Este 4 de abril de 2024 se cumple un año de la llegada de Paulo Pezzolano al Real Valladolid. 365 días en los que el técnico uruguayo ha vivido más momentos negativos que positivos a pesar de su continuidad tras el descenso.

Todo empezó con la goleada 6-0 en el Estadio Santiago Bernabéu, la cual produjo la destitución de José Rojo, Pacheta, su despedida y la contratación de Pezzolano para dirigir a un conjunto blanquivioleta que a 11 jornadas del final se encontraba fuera del descenso.

El efecto entrenador nuevo le duró al equipo vallisoletano tres jornadas, con los siete puntos de nueve que hacían ver encauzada la continuidad en la máxima categoría. Sin embargo, con ocho partidos por delante, el charrúa fue incapaz de salvar al Pucela del descenso con un último partido ante el Getafe CF sin tirar a puerta que comenzó la crispación de la afición contra su figura y que dejó la sensación de que no había estilo de juego, que perdura hasta la actualidad.

Etapa posdescenso

Lo más sorprendente fue que la entidad optó por su continuidad en el banquillo a pesar de bajar a LALIGA Hypermotion. El Club hizo una revolución en el vestuario con la marcha de muchos futbolistas y la llegada de hasta 10, pero la gestión de Pezzolano con los mimbres que tenía dejó que desear desde el principio.

Por ello, el inicio de temporada fue duro, ya que el técnico llevaba a sus espaldas un descenso exprés y un inicio con cuatro puntos de 15 en Segunda División que hizo sonar las primeras alarmas con su posible destitución.

Salvó el matchball contra el FC Cartagena con un tanto del olvidado Iván Cédric en los últimos minutos del choque y comenzó una buena racha de resultados que llegó hasta finales de noviembre, cuando volvieron a venir mal dadas. Se perdieron cinco partidos de seis contando la Copa del Rey y volvió a estar cuestionado con una losa cada vez más grande en su haber.

Los resultados, junto a algunas de sus declaraciones y los cánticos de la afición contra él, generaron un clima irrespirable en el Nuevo Estadio José Zorrilla y una relación rota entre aficionados y entrenador. Desde el inicio de la segunda vuelta hasta esta fecha el miedo a perder invadió al entrenador, que ostenta un bagaje de cinco empates, más que en las 22 jornadas anteriores, cuatro victorias y tres derrotas, cosechando cuatro meses y medio sin ganar fuera de casa.

Sin cumplir el objetivo

A falta de nueve jornadas para el final de la temporada regular en la categoría de plata su equipo se encuentra a tres puntos del ascenso directo y en play off de milagro, lo que sumado a lo citado anteriormente y al "¡Pezzolano dimisión!" que resuena día sí y día también en el feudo pucelano hace que Paulo Pezzolano quede muy en entredicho y que su marcha pueda estar más cerca que nunca en las últimas semanas.