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Rolf Feltscher, polivalencia para el lateral derecho

Juan Viladés

Rolf Günther Feltscher Martínez es un lateral derecho de 26 años que llegó al Getafe en el pasado mercado estival proveniente del Duisburg alemán. Nacido en Suiza pero de origen venezolano, este lateral diestro se desempeña en cualquiera de las cuatro posiciones de la zaga, si bien el carril derecho es su demarcación natural. La presencia de Damián Suarez y Molinero en las filas azulonas ha provocado que el lateral helvético-venezolano apenas haya tenido oportunidades, habiendo disputado tan sólo 518 minutos en 7 partidos, 6 de ellos como titular.

Nacido en Bülach (Suiza), Feltscher se formó en la cantera del GS Zürich, para más tarde debutar como profesional en las filas del Grasshopers suizo. En el verano de 2010 dio el salto a Italia, donde firmó con el Parma, equipo en el que alternó varias cesiones a clubes como el Pádova (Lega Pro) o el Grosseto (Serie D). Tras no cuajar en el país transalpino, retornó a Suiza, donde una buena temporada en el Laussane Sport despertó el interés del Duisburg, donde permaneció dos temporadas antes de recalar en el conjunto getafense, último destino antes de unirse a la disciplina blanquilla.
Feltscher destaca por ser un futbolista capaz de adaptarse a varias posiciones. De hecho, el verano pasado disputó la Copa América con Venezuela como lateral izquierdo, una demarcación diferente a su habitual presencia en el flanco derecho de la zaga. A lo largo de su carrera también ha disputado algunos partidos como defensa central, ayudado por su potente físico. Una cualidad, la de la polivalencia, que está al alza en este mercado invernal, como ya se ha demostrado con el fichaje de Jesús Valentín, que en cuatro partidos ha repartido sus minutos entre el centro del campo y la defensa.
Su estilo de juego difiere de los dos laterales derechos actuales del Real Zaragoza, Fran Rodríguez e Isaac Carcelén. Feltscher destaca por ser un jugador de corte defensivo, más centrado en cerrar su carril que en sumarse al ataque con asiduidad. Además, su altura (1,84) puede ser de gran ayuda en la faceta aérea, mientras que su contundencia defensiva (prueba de ello es su expulsión en la jornada 7) debería aliviar las carencias defensivas que sufre el equipo zaragocista. Por el contrario, sus escasas virtudes técnicas, unidas a sus despistes tácticos, pueden ocasionar más de un susto para el público de La Romareda.

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