Máxima igualdad desde el inicio

Es sabido que la Segunda división española es una competición extremadamente larga e igualada, algo que se puede ver desde el mismo inicio de la liga. A falta de un encuentro por disputar, todos los equipos han conseguido al menos un punto en sus dos primeros partidos y ninguno ha logrado ganar sus dos enfrentamientos.

Todo queda pendiente del partido entre FC Barcelona B y CD Tenerife, dos equipos que ganaron en la jornada inaugural y que podrían alzarse al liderato de la competición con 6 puntos. De lograrlo, igualarían la clasificación de la pasada temporada, en la que tan sólo el Levante ganó sus primeros dos partidos y en el que todos los equipos puntuaron en las dos primeras jornadas.
Sin embargo, esta no es una situación habitual. Si miramos hacia atrás en el tiempo, puede verse como en las primeras jornadas de competición lo más normal es la existencia de dos o tres equipos que ganan sus dos primeros encuentros y otros tantos incapaces de puntuar. Llama la atención el caso de temporadas como la 2011/12 en la que Elche y Almería sacaron sus 6 primeros puntos, pero hasta cinco equipos se mantenían a cero -FC Barcelona B, Hércules, Mirandés, Sporting y Racing-.
Para encontrar algo similar a lo sucedido en estas dos últimas temporadas habría que remontarse hasta la campaña 1990/91 en la que tras dos partidos, ningún equipo fue capaz de sumar los seis puntos -Deportivo y Lleida sumaban 4- y todos los equipos lograron al menos uno, hasta siete (como ahora). Sirviendo aquello como ejemplo, puede verse como la igualdad se mantuvo hasta el final, con el Albacete campeón con 49 puntos y tan sólo seis más que el sexto de la clasificación (entonces la victoria valía 2 puntos) o el Elche, 17º y descendido con 34 puntos, sólo dos menos que el 11º.