Alberto Zapater, orgulloso capitán del Real Zaragoza reencontrado con un viejo amor: el gol vistiendo la elástica blanquilla. Un capitán que analizaba con esmero el empate que, gracias a su tanto, pudo alcanzar su equipo ante el Real Oviedo tras empezar perdiendo por dos goles a cero y que se lamentaba de no haber podido hacer el tercero con el que conseguir la victoria, pese a haberlo tenido cerca.
Tras el trepidante duelo ante el Oviedo, que gozó de cuatro goles con tan sólo 20 minutos de diferencia entre sí, Zapater repasaba ante los micrófonos de GOL Tv la actitud de un Real Zaragoza que no se ha rendido, pero que se queda con un regusto amargo tras el empate. "Lo importante es que hemos sacado un punto y más como se nos había puesto el partido. Pero me ha dado la sensación de que en la segunda podríamos haber hecho el tercero", explicó el capitán blanquillo.
No le preocupa la falta de acierto en la segunda mitad, porque espera que los goles lleguen. "Ya entrarán, la cuestión es que las hacemos -las oportunidades- y tenemos confianza", señaló. "No se puede evitar mirar la clasificación pero es demasiado pronto y tenemos que hacer válido el empate y ganar en casa que ya toca", matizó Zapater.
Recordó lo difícil que es jugar en un estadio como el Carlos Tartiere, famoso por el empuje de la afición oviedista. "Este campo es de Primera y la gente aprieta y este equipo está hecho para estar arriba, y le hemos casi dado la vuelta al marcador", reseñó orgulloso de su equipo.