Lalo Arantegui continúa trabajando en la búsqueda de refuerzos para la delantera. Con las negociaciones por Marc Gual atascadas en su recta final, el director deportivo blanquillo se centra en acercar posturas con Samuele Longo. La del italiano no es una operación fácil. Sus dos últimas temporadas hacen que tenga muchos pretendientes, entre los que el Real Zaragoza se debe hacer hueco con otros atractivos que no son ni el económico ni la categoría.
Longo sigue buscando un acomodo en Primera división. Varios clubes de esa categoría se han interesado en él, si bien ninguno ha presentado una oferta concreta. Apurará sus opciones hasta el final. Sí lo han hecho otros clubes de Segunda a priori más poderosos que los aragoneses en lo económico, como el Oviedo y el Dépor, que es ahora mismo el mejor colocado junto a los zaragozanos para hacerse con los servicios del espigado delantero.
A pesar de que la competencia es alta, la secretaría técnica zaragocista es optimista con sus opciones. El buen desempeño del equipo en el último año y el gran ambiente que rodea al vestuario son las bazas de Lalo Arantegui para lograr hacerse con un jugador que ya rechazó la oferta blanquilla en la pasada temporada. Longo llegaría a Zaragoza con la vitola de segundo delantero o delantero complemento. El papel de primer delantero quedaría reservado para la hipotética llegada de Marc Gual, con quien se llevan ya varias semanas de negociación.
La llegada del delantero es uno de los pocos frentes abiertos de la dirección deportiva. Toquero, Medina e incluso Pombo cuentan para esta posición, para la que se busca un delantero capaz de marcar las diferencias en Segunda, como este año ha hecho Borja Iglesias. La fe de Lalo tanto en Gual como en Longo es alta. Del catalán se espera que explote todo el potencial que se le intuye esta temporada, mientras que el italiano es un hombre más consagrado en la categoría de plata.