Lucas Alcaraz y una mejora que no llega

No lo tenía fácil Lucas Alcaraz a su llegada al Real Zaragoza. El granadino desembarcó en una Romareda que acababa de ser testigo de un empate del Tenerife en el último minuto que costó dos puntos. Aquella jugada se había llevado por delante a un Idiakez que en diez partidos había sacado once puntos. El equipo blanquillo navegaba atribulado a dos puntos del descenso, con dos victorias, cinco empates y tres derrotas. Cuando lo cogió Alcaraz, llevaba seis partidos sin ganar. Levantar al equipo era una misión difícil, pero de momento lleva peores números que el técnico vasco.

Con Alcaraz, en la mitad de jornadas, el Real Zaragoza ya ha perdido los mismos partidos que con Idiakez, tres. Ahora está en puntos de descenso (con 15, empata con el Elche, cuarto por la cola, y con el Extremadura, por encima de ellos). Además, ha encajado gol en los cinco partidos con el técnico granadino, dos como mínimo en todos salvo en el de la victoria por 1-3 ante el Nàstic.

Estos son los fríos números; el Zaragoza con Alcaraz suma menos que con Idiakez y concede más goles. Los aspectos cualitativos en los que haya ido a mejor aún no se han traducido en mejoras tangibles; los dos duelos seguidos en casa ante el Cádiz y el Córdoba se muestran indispensables para empezar a sumar esos puntos que se están resistiendo. Será tiempo de que el club aragonés comience a carburar y que demuestre que se puede recuperar. De confirmar lo poco bueno que se ha visto, es decir, las segundas partes ante el Nàstic (dos goles y la culminación de la remontada) y el Mallorca (otro par de goles y un empate que pudo ser victoria).

De lo contrario, el conjunto de La Romareda podría entrar en una situación mucho más nociva y peligrosa que cuando estaba Imanol Idiakez.