Un Real Zaragoza inoperante
El Real Zaragoza cuenta con una larga lista de problemas. Nada nuevo si uno observa el lugar de la clasificación en el que se sitúa el conjunto aragonés, ahogado en estos momentos en zona de descenso. Sin embargo, el equipo blanquillo añade durante las últimas fechas una carencia más a las que ya tenía desde el inicio: la falta de gol.
No hay más que observa los números para ver que los aragoneses se encuentran en la zona media de la clasificación de equipos más goleadores de LaLiga 1|2|3. Un dato que además es engañoso, ya que buena parte de los 17 goles anotados por el Real Zaragoza se concentran en la parte inicial de la campaña. Hasta siete, el 41%, fueron anotados en las primeras cuatro jornadas, con el colofón del 0-4 del Carlos Tartiere, partido desde el cual varió el rumbo del equipo.
Además, un simple vistazo comparativo a lo sucedido la campaña anterior, de la cual se comparte buena parte de la plantilla, también evidencia el problema. En la temporada 2017/18 el Real Zaragoza se quedó en blanco en nueve encuentros a lo largo de toda la campaña. En la presente, ya son siete las ocasiones en las que los jugadores blanquillos han vuelto a casa sin ser capaces de perforar la portería de su rival.
A cero en cuatro partidos con Alcaraz
Por si fuera poco, la llegada de Lucas Alcaraz ha agudizado el problema. Además de ser incapaz de cerrar su propia puerta, el Real Zaragoza con el técnico andaluz también ha perdido efectividad de cara al arco rival. Se pudo ver en los dos primeros encuentros del nuevo entrenador ante Elche y Granada, en los que el equipo aragonés se mostró inoperante; también en los dos últimos hasta la fecha, ante Alcorcón y Cádiz. En total cuatro de los seis partidos con Alcaraz en el banquillo.
Mucho trabajo para el entrenador, que deberá decidir hacia dónde quiere remar, si prefiere que el equipo crezca desde la defensa buscando al fin dejar su portería inmaculada o si es mejor lanzarse al ataque para revertir los números de un equipo inoperante cuyos datos son tremendamente preocupantes.