El Real Zaragoza de Lucas Alcaraz volvió a mostrar cambios en el once. El técnico andaluz realizó un nuevo cambio de sistema, dejando atrás el 3-5-2, formación que no ha traído mejorías al conjunto blanquillo y volviendo al 4-4-2. La gran ausencia fue la de Jorge Pombo, que fue ovacionado en su entrada al campo en el minuto 67 de la segunda parte.
El Real Zaragoza parecía que al principio de temporada tenía muy claro el sistema con el que jugar, el famoso "rombo" que tanto dio al equipo aragonés la pasada campaña. Pero la falta de efectivos en el centro del campo debido a las numerosas lesiones y la mala racha de resultados, obligó a Imanol Idiakez a modificar el sistema.
Lucas Alcaraz al ver que el sistema no funcionaba, decidió probar con un sistema más arriesgado el 3-5-2. Este sistema dio sus frutos frente al Nástic, pero los resultados no serían los mismo en el resto de partidos.
El entrenador zaragocista decidió volver al rombo en el partido frente al Córdoba, pero cambiando matices. El técnico andaluz hizo hasta seis cambios con respecto al partido anterior. La novedad y la sorpresa del once, fue la ausencia de Jorge Pombo. El canterano se quedó por primera vez en la temporada fuera del once inicial y junto a Cristian era el único jugador que había disputado casi todos los minutos.
Verdasca, Álex Muñoz, Lasure, Guti, Ros y Álvaro fueron las seis novedades en detrimento de Nieto, Bruno Perone, Aguirre, James, Eguaras y Pombo. La falta de un once claro y las lesiones de algunos futbolistas ha provocado que el entrenador zaragocista haya hecho tantos cambios en los onces iniciales sin encontrar un once de garantías. La fragilidad defensiva y la falta de ideas en el centro del campo están siendo uno de los grandes problemas del conjunto aragonés.