El próximo fin de semana el Real Zaragoza visitará el estadio de Riazor para verse las caras con el Deportivo de la Coruña. Un encuentro que, en otro tiempo, era de habitual rivalidad en la máxima categoría. Es además el único duelo de LaLiga 1|2|3 que un día se produjo también en competición europea.
Por aquel entonces no era un partido cualquiera. Se veían las caras dos de los mejores equipos de Europa. El Real Zaragoza había encadenado durante dos temporadas consecutivas la consecución de la Copa del Rey y de la Recopa, avanzando con paso firme en busca de un segundo título europeo consecutivo. El Deportivo de la Coruña vivía su primera gran generación, la del super-Dépor que fue capaz de lograr la Copa del Rey a la par que se situaba segundo en Liga tras el Real Madrid.
Corría entonces la temporada 1995/96, que había comenzando con el conjunto gallego arrollando al merengue en la Supercopa. Por su parte, un renovado Real Zaragoza vivía una temporada irregular en la que la competición europea suponía la gran esperanza para salvar la campaña.
Ambos equipos avanzaban con paso firme por la Recopa. El Deportivo se deshizo del APOEL chipriota en dieciseisavos, con un memorable 8-0 en Riazor; en cuartos, más problemas para deshacerse de Trabzonspor turco, al que también golearía en tierras gallegas, por 3-0. Por su parte, el Real Zaragoza había superado al Inter Bratislava, logrando la victoria en ambos partidos; algo que también haría, aunque con más dificultades, frente al Brujas. El bombo, siempre caprichoso, quiso emparejar a ambos equipos en los cuartos de final.
Una eliminatoria que se produjo durante el mes de marzo de 1996. Por entonces, el Real Zaragoza combinaba partidos de Liga, acababa de ser eliminado en Copa por el Espanyol a mitad de febrero y se jugaba la Supercopa europea frente al Ajax, siendo goleado por 4-0 en Olympisch Stadion el 28 de febrero.
El 7 de marzo el Real Zaragoza visitó Riazor. Un estadio en obras que acogió un encuentro de alternativas, con ocasiones para ambos equipos y que se decidió con gol de David, canterano del equipo gallego que se aprovechó de la indecisión de la defensa blanquilla para superar a Belman, que aquel día defendió la portería del equipo aragonés. Dos semanas más tarde, el 21 de marzo, la eliminatoria llegaría a La Romareda. Con la esperanza de la remontada, los de Víctor Fernández saltaron a un estadio abarrotado. Antes de llegar el descanso, un jovencísimo Morientes lograba igualar la eliminatoria tras una buena jugada combinativa del equipo. Pese a las ocasiones locales, lo que llegaría sería el gol del Dépor. Un error de Solana le dejaba la ocasión de anotar a Bebeto –campeón del mundo con Brasil en 1994– para igualar en encuentro y definir la eliminatoria.
Sería aquel el último encuentro del Real Zaragoza en una competición que hizo grande el club aragonés antes de desaparecer en 1999. El Deportivo cayó en aquella campaña frente al que después sería campeón, el Paris Saint Germain de Lama, N’Gotty, Loko, Raí, Dely Valdés o Dkjorkaeff. Un pasado brillante para dos equipos que se ven ahora las caras con muy distintos objetivos.