El Extremadura desembarca en el estadio municipal de La Romareda en una situación en la que pocos confiaban a principio de temporada, fuera de la zona de descenso y por encima del Real Zaragoza. Un pequeño éxito en el que tiene mucho que ver la figura del principal delantero del equipo extremeño, y a la postre, máximo goleador de LaLiga 1|2|3 en estos momentos: Enric Gallego.
La de Gallego no es una historia habitual de los futbolistas de élite. Y es que a los 32 años, el jugador catalán se encuentra en su temporada de debut en el fútbol profesional, después de una trayectoria plagada de goles y contratiempos.
Formado en las categorías inferiores del Espanyol, debutó en 2ªB en la ya lejana temporada 2009/10 en la que el filial perico descendió de categoría. Pasó por entonces por el Premià, todavía cedido por el equipo barcelonés para recalar finalmente en el Cornellà. Al sur de Barcelona compaginaba los goles en la categoría de bronce con el trabajo de mantenimiento de bicicletas en la empresa del presidente. Y es que la lista de empleos de Enric Gallego es incluso más amplia que la de los clubes en los que ha marcado goles: camionero, repartidor, albañil, trabajó en una empresa de climatización y por supuesto, futbolista.
En la temporada 2013/14 tuvo ocasión de volver a 2ªB, en esta ocasión con el Badalona, pensando ya únicamente en el fútbol. Contaba por entonces con 27 años y pese a la tardanza, estaba a punto de despegar. La temporada siguiente fichó por el Olot, pero a mitad de campaña y tras marcharse sin marcar volvió a Cornellá. Tres goles en media temporada, nueve en la siguiente, dieciséis en la penúltima y la locura. En media temporada en el equipo cornellanense anotó nada menos que 18 goles en 19 partidos, lo que le valió para firmar por el Extremadura a mitad de temporada, donde anotaría otros 10, para ayudar al equipo a ascender a LaLiga 1|2|3.
Ahora tiene la posibilidad de sentirse futbolista profesional y no piensa desaprovecharla. En 16 partidos disputados ha conseguido anotar 14 tantos, con mención especial a los cuatro que le hizo al Reus en el debut de Rodri en el banquillo. Un killer cuyo nombre suena con fuerza en las agendas de muchos equipos tanto de LaLiga 1|2|3 como de LaLiga Santander, pero que en estos momentos centra sus esfuerzos en el equipo que le dio la oportunidad, el Extremadura.
Así se presenta en La Romareda como la principal amenaza para evitar una alegría de los locales en un día de fiesta, el de la vuelta de Víctor Fernández al Real Zaragoza.