Un Sporting revitalizado

El Real Zaragoza tiene un hueso por delante: el Sporting. En el último mes y medio los asturianos se han convertido en un rival temible. La razón tiene nombre y apellido: José Alberto López. Se trata de un joven entrenador (36 años) que a mediados de noviembre tomó las riendas de los rojiblancos. Rubén Baraja acababa de perder el derbi contra el Real Oviedo. El equipo andaba a dos puntos del descenso, y la afición, algo insólito, se dedicaba a una cosa durante los partidos: corear el nombre de José Alberto. En ese momento entrenaba al filial, y la Directiva lo tuvo fácil: era su oportunidad.

El nuevo técnico debutó en un campo difícil: el del Granada. Ahí, se acabó de ganar del todo a la afición. Su equipo logró una gran victoria por 1-2, con Álvaro Traver como autor del gol decisivo en el último minuto. El delantero había jugado a sus órdenes el año pasado, cuando el Sporting B se clasificó para los play off de ascenso a Segunda A. También jugó con otro conocido, Nacho Méndez, e hizo debutar al defensa Cordero, que hasta ese momento había estado en el B. Una victoria que tuvo todo lo necesario para enganchar a la parroquia gijonesa.

INVICTOS CON JOSÉ ALBERTO

Desde aquella tarde en Granada, el Sporting está invicto. Se han impuesto en casa al Tenerife y al Mallorca. Fuera de casa, han empatado contra el Elche y el Lugo a cero. Además, han pasado de ronda en Copa del Rey tras un empate a dos contra el Eibar en Ipurua. Ahora mismo, el Sporting atisba los puestos de play off: están a seis puntos. José Alberto no sólo ha enganchado a los jóvenes. Jugadores como Blackman, Durdevic, Babin o Mariño han subido su nivel. Otros sin embargo han caído en el ostracismo debido a la pujanza de la 'sangre' joven. Son los casos de Canella, Molinero o Hernán. Los tres no han tenido ni un minuto desde el último partido de Rubén Baraja.