La principal novedad, el escenario

El Real Zaragoza ha llevado a cabo una nueva sesión de entrenamiento de cara al encuentro del próximo fin de semana ante Osasuna. En esta ocasión, los de Víctor Fernández han contado con la principal novedad de trabajar en el estadio municipal de La Romareda, ya que se ha procedido a realizar la versión actualizada de la fotografía del equipo.

Por esta razón, el conjunto blanquillo ha tenido ocasión de trabajar en el escenario de sus encuentros como local, aunque en esta ocasión, alejados del ruido habitual que puebla las gradas del coliseo zaragozano y que se acercará más al ambiente de El Sadar del sábado, que la callada armonía en la que han trabajado los aragoneses en la mañana del miércoles.

Un entrenamiento que en el que se ha recuperado la figura del entrenador, Víctor Fernández, ausente en la mañana del martes debido a una pequeña intervención de la que apenas se ha podido apreciar una tirita en el rostro del técnico. Por lo demás, los mismos jugadores de la primera plantilla que estuvieron en la Ciudad Deportiva el martes han hecho lo propio en La Romareda; es decir, sin Benito ni Zapater y con Lasure, Papu y Álex Muñoz trabajando al ritmo del resto del grupo.

Además, el cuerpo técnico ha tenido a bien contar con un nutrido grupo de jugadores del filial, tónica habitual durante buena parte de las jornadas de trabajo de las últimas semanas, en las que la cantera ayuda a completar los entrenamientos del primer equipo. En esta ocasión han sido los gemelos David y Carlos Vicente, ambos jugadores de banda derecha; Torras, mediocentro y Bouayadi, delantero, los que han trabajado a las órdenes del técnico aragonés.

Para la sesión del jueves, el equipo volverá a la rutina con un entrenamiento programado para las 11 de la mañana en la Ciudad Deportiva, en la que será el penúltimo antes de viajar hacia Pamplona para el partido ante Osasuna.