Álvaro Vázquez anotó ayer su octavo gol con la camiseta del Real Zaragoza y sigue siendo el único faro goleador del conjunto zaragocista. El delantero catalán, criticado en las últimas citas frente a Lugo, Albacete y Osasuna por su ocasiones falladas, en el partido frente al Almería volvió a marcar y puso fin a una racha malísima del equipo, que acumulaba casi tres partidos sin meter gol.
La temporada del Real Zaragoza se podría resumir en una gran máxima, poca efectividad en las dos áreas, el conjunto blanquillo no es eficaz ni atacando ni defendiendo, algo vital en una categoría tan igualada como es Segunda división.
El cuadro aragonés genera mucho, otra vez volvió a tener más ocasiones que el rival, pero estas ocasiones no acaba de materializarlas. Vázquez lleva ocho goles y es el máximo goleador del equipo, seguido de Javi Ros y Jorge Pombo, ambos con tan sólo tres goles (Hay que recordar que los tres goles de Javi Ros fueron de penalti). Números muy pobres para un equipo que quiere estar arriba, Marc Gual tan sólo lleva dos, los mismos que Diogo Verdasca, Papu y Alberto Soro.
Estos escasos números goleadores reflejan a la perfección el por qué el conjunto blanquillo se sitúa decimoquinto con 31 puntos en la tabla, y con un golaverage negativo, 30 goles anotados y 35 encajados. El Real Zaragoza recibe más goles de los que mete, algo imposible si se quiere estar en la zona alta.
Desde el líder, que es Osasuna, hasta el puesto duodécimo que lo marca el Sporting de Gijón, todos los equipos tienen un golaverage positivo. En cambio desde el puesto decimotercero, que lo marca el Numancia hasta el colista, el Nástic de Tarragona, todos los equipos tienen un golaverage negativo.
El Real Zaragoza necesita de los goles de la segunda línea como Soro, Pombo, Aguirre y jugadores como Linares y Marc Gual tienen que ser más letales para que el conjunto blanquillo consiga sumar de tres en tres y olvidarse rápidamente de los puestos de abajo.