Avanza la pretemporada del Real Zaragoza y Víctor Fernández se ha encontrado con un problema hasta cierto punto inesperado. Ante la salida prevista de Diogo Verdasca y la confirmada de Álex Muñoz, apenas queda un central del primer equipo sano, Pichu Atienza, y otros tres, con diversas dolencias que les impiden trabajar con normalidad: Guitián, Clemente y Grippo.
Todos ellos está previsto que puedan apurar sus respectivas recuperaciones de forma que lleguen al inicio de la competición en LaLiga 1|2|3. En el caso de Guitián, el problema será el de coger el ritmo del resto de sus compañeros, después de prácticamente un mes al margen tras ser operado de apendicitis. Clemente está pendiente de su rodilla. La que se lesionó la pasada campaña y que le ha obligado a parar ahora tras comenzar la preparación al ritmo del grupo. En el caso de Grippo, el central suizo está cumpliendo plazos y su vuelta al equipo podría producirse en breve.
Simone Grippo sufrió una grave lesión de rodilla en el mes de noviembre de 2018, en el encuentro frente al Granada. Desde entonces, su prioridad es recuperarse con garantías, especialmente desde que el club le renovara pese a mantenerse en el dique seco. Un camino largo, de trabajo en solitario, que el suizo ha dejado atrás definitivamente. Durante las primeras semanas de pretemporada trabajó con el grupo pero con ciertas precauciones. Algo que ya no se produce, trabajando al ritmo del resto de sus compañeros.
Como indicara Lalo Arantegui primero y Roberto Cabellud después, Grippo estará preparado para volver a los terrenos de juego en los primeros encuentros del mes de agosto, teniendo en Tarragona el primer gran objetivo. Así pues, bien podría ser en Nou Estadi el lugar de la vuelta del central al césped, aunque fuera apenas unos minutos. Un respiro para Víctor Fernández que ha visto como en esta pretemporada se ha encontrado un centro de la zaga lleno de problemas.