Víctor Fernández valoró de forma positiva el punto conseguido frente al Real Oviedo en el Carlos Tartiere. El técnico aragonés puso en valor la capacidad del Real Zaragoza para sobreponerse al hecho de estar por debajo en el marcador en dos ocasiones, sin embargo, puso sobre la mesa la falta de precisión de los jugadores del centro del campo blanquillo.
Lo cierto es que la estadística se pone de parte de Víctor, poniéndole cifras a las sensaciones mostradas por el míster zaragozano. No se reflejó sin embargo en los datos de posesión, en los que el Real Zaragoza volvió a liderar, condicionado en parte por el resultado, adueñándose del esférico durante el 63% del tiempo.
Aunque quizá no sea el mejor partido para llevar a cabo una comparación, pues los datos frente al CD Lugo fueron excepcionales, sirve como medida para observar la diferencia. En ese encuentro, en La Romareda, el equipo aragonés tuvo el balón el 65% del tiempo. Además, frente al equipo gallego se ejecutaron 515 pases, de los cuales fueron precisos el 89%. En Oviedo, la precisión se redujo notablemente, pues de los 462 pases, se realizaron con precisión el 82%.
En rueda de prensa dejó Víctor otra frase al respecto de este tema “Eguaras no es normal que pierda tantos balones como ha perdido hoy”. Respecto al partido anterior, la efectividad del centrocampista navarro descendió del 93% al 88%. Sin embargo, mejoraron sus números ligeramente jugadores como Kagawa, que pasó del 85% al 87% o Javi Ros, del 69% al 78%. El descenso se dejó notar también en Pichu Atienza, jugador de referencia a nivel de pases realizados con acierto, uno de los mejores de la categoría y cuya precisión cayó del 95% al 89%.
Un punto a mejorar de cara a las próximas citas, en las que el Real Zaragoza tendrá dos duras pruebas en el estadio de La Romareda frente a Málaga y Cádiz, que marcarán el destino a medio plazo del equipo aragonés en LaLiga SmartBank.