José Enrique, un año después, se ríe del raro tumor que casi le cuesta la vida

José Enrique Sánchez, que se retiró del fútbol en el Real Zaragoza, anunció el pasado mes de abril que el extraño tumor cerebral que a punto estuvo de costarle la vida era historia. A pesar de ello, las revisiones en el Instituto Curie de París no paran y el exfutbolista recordó hace unos días cómo ha cambiado su vida en el último año: de recibir una revolucionaria terapia de protones a ir para un simple control.

"¡Qué diferencia hace un año!", comenzó escribiendo José Enrique en su cuenta de Instagram, donde dio gracias al universo por seguir vivo: "El año pasado llegué aquí, a París, para comenzar mi viaje de protontoterapia. ¡Ahora, un año después y en plena salud, estoy aquí para un chequeo y una visita! El universo tiene una forma divertida de hacer que las cosas funcionen como deberían. Solo tienes que confiar en el proceso".

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José Enrique, un año después del tratamiento que acabó con su cáncer: "El universo tiene una forma divertida de hacer que las cosas funcionen como deberían. Solo tienes que confiar en el proceso"

Así anunció José Enrique que el cáncer era historia

Al valenciano le detectaron en 2017 "un cordoma, un tipo de tumor muy inusual que se desarrolla en el cráneo y en la columna". Este es un tipo de cáncer que sólo posee una persona entre un millón y que lo tenía José Enrique detrás del ojo desde que era joven. No se dio cuenta hasta que le empezó a crecer y eso hizo que el nervio estuviera presionado y no pudiera ver bien. "Lo primero en lo que pensé es que iba morir", reconoció el exblanquillo en The Times.

Este tumor hizo que el exlateral izquierdo del Real Zaragoza, cuya vida estuvo pendiente de un hilo, tuviera que ser operado rápidamente y recibir radioterapia, quimioterapia y el citado tratamiento de protontoterapia. El 15 de abril comunicó a través de las redes sociales que su cordoma, por fin, era historia: "Hoy he recibido la mejor de las noticias, mi cirujano me ha llamado, después de recibir los resultados de la resonancia. Él me ha confirmado y me ha dicho que el área está limpia y que se ve increíble. Gracias a todos por vuestro apoyo".

Ahora, un año después, José Enrique sigue celebrando que le ganó la batalla a esta maldita enfermedad y no es para menos.

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