El Real Zaragoza consiguió volver a la senda de la victoria en el encuentro disputado frente a la UD Las Palmas en La Romareda. Pese a la crisis de juego y resultados que ha vivido el equipo aragonés durante las últimas semanas, los blanquillos se mantienen en la parte alta de la clasificación, aupados en puestos de promoción por el ascenso.
Una situación que contrasta con la vivida apenas un año antes, en el que la depresión se adueñó de la afición zaragocista, que vio como su equipo, que venía de jugar por el ascenso, se sumía en la parte baja, llegando a peligrar incluso la categoría. Imanol Idiakez primero y Lucas Alcaraz después fueron incapaces de dar una respuesta a las necesidades del Real Zaragoza.
Tuvo que llegar el hijo pródigo, Víctor Fernández, para sacar al equipo aragonés del atolladero y rescatar el orgullo perdido de los blanquillos. Pese a todo, las dificultades permanecieron prácticamente hasta el final de la temporada. En la primera vuelta, con tres entrenadores, el Real Zaragoza apenas fue capaz de sumar 22 puntos. Precisamente los mismos que alcanza en estos momentos, con 14 partidos jugados, a siete del final del final de año.
Un registro llamativo que se suma a otro. Y es que los predecesores de Víctor, Idiakez y Alcaraz, duraron 18 encuentros en el banquillo, en el que sumaron 16 puntos entre ambos. Una cifra que esta temporada se consiguió en la mitad exacta de partidos, nueve. Buena muestra del camino recorrido durante estas jornadas por el Real Zaragoza que, pese a las dificultades, parece decidido a luchar por mantenerse en los puestos de privilegio hasta el final de la temporada en LaLiga SmartBank.