En el mundo del fútbol existen multitud de ejemplos de familias en la que los hijos siguieron el camino de los padres e intentaron emular o mejorar la carrera futbolística de sus progenitores. Las comparaciones siempre son odiosas y el apellido de grandes estrellas ha pesado en la carrera de sus hijos y algunos de estos no han llegado a ser lo que fueron sus padres. Pero también hay casos diferentes y curiosos como el de Javier Puado Carrascosa y el de su hijo Javier Puado Díaz, último fichaje del Real Zaragoza.
Francisco Puado Carrascosa es un exfutbolista de Alcalá de Henares que debutó en Primera división en la década de los 90 y hasta entonces, tuvo que vivir la gran parte de su trayectoria en equipos de categorías modestas. Sant Andreu, Hospitalet, Santboià, Vilassar, Vilanova i el Poble Sec...este exdelantero madrileño tuvo que luchar y le costó mucho sacrificio llegar a la élite del fútbol español. Con 21 años, debutaría con el Osasuna, nada y nada menos, que en el césped de La Romareda contra Víctor Fernández, hoy el entrenador de su hijo. Por otro lado, Javi Puado hijo ha tenido una carrera totalmente diferente, enseguida llegó a una de las mejores canteras del fútbol, La Masia y con 21 años ha jugado más de diez partidos de Primera división y hoy vuelve a La Romareda, donde aquel 20 de octubre de 1991 debutaba su padre con su misma edad. El fútbol da muchas vueltas y sino que se lo digan a los Puado.
Javi Puado Díaz nació un 25 de mayo de 1998 en Barcelona. De sus inicios, Puado recuerda cómo comenzó a correr detrás de un balón: "Empecé en un club de al lado de mi casa, jugando contra chicos mayores que yo, algo que te ayuda a crecer como futbolista. "Después afirma que probó el fútbol sala en el colegio, pero pronto se decantó por el fútbol: "Pase al Barça, donde estuve hasta infantiles. Luego tres años en el Cornellà, y en juveniles fiché por el Espanyol".
Su padre le llevó a las pruebas de la escuela de fútbol del Barça y no hubo ningúna duda en él. Entró a la primera ya en la etapa de alevín. En La Masia compartió vestuario durante varias temporadas con jugadores de la talla de Dani Olmo, que actualmente ha debutado con la absoluta y Carles Aleña, actual jugador de la primer plantilla del club culé. Puado siempre destacó por su habilidad, conducción, remate y velocidad.
De la cantera azulgrana pasó al Cornellà en categoria cadete, tras su breve paso por este club fue el RCD Espanyol en juveniles el club que finalmente apostó por él. En el club perico formó parte de una de las mejores generaciones de la cantera perica y jugó con futbolistas como Melendo, Pedrosa, Joan Jordan, Marc Gual... En su primer año en Liga Nacional consiguieron quedar campeones de liga y al año siguiente Puado sobresaldría sobre el resto en un grupo donde se encontraba el Zaragoza y acabó el curso 2015-2016 con diez goles. Fue tanto el interés que generó que otro club potente se fijó en él. Este fue el Real Madrid y en concreto, Víctor Fernández era el director de la cantera en este momento.
Al año siguiente daría el salto al filial del club perico y en uno de los primeros partidos llegó el momento más complicado de su carrera. Puado se rompió el ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda y estuvo ocho meses lesionado. Pero esto sólo sería un alto en el camino del joven futbolista, ya que al año siguiente volvería más fuerte que nunca y lideró al equipo en el ascenso a Segunda B, el delantero catalán anotó 12 goles en 34 partidos en Tercera división. Finalizada la campaña, el filial blanco volvió a preguntar por él y estuvo a punto de marcharse al Castilla, pero Chen Yansheng, dueño del Espanyol paralizó la operación.
El delantero catalán ha participado y ha sido convocado con ambas selecciones con tan sólo 21 años, sin duda es una promesa del fútbol español.