El ejemplo de Soro y Ratón
Durante los últimos días Víctor Fernández ha incidido en una idea. El técnico del Real Zaragoza ha señalado uno de los problemas que, a su parecer, acecha al club aragonés en la presente temporada. No es otro que el escaso rendimiento de alguno de los jugadores de la plantilla, que se sitúa por debajo de lo que requiere un equipo que quiere luchar por estar en la zona alta de LaLiga SmartBank.
Un mensaje sin claros destinatarios, al no ir acompañado de nombres propios, pero que, por los hechos y por lo visto sobre el campo, tiene varios candidatos. El principal damnificado, al menos en esta misma semana, ha sido Jorge Pombo, que quedó incluso fuera de la convocatoria para el partido frente al Rayo Vallecano.
Sin embargo, tras el partido, Víctor también quiso dejar claro que también hay jugadores que saben aprovechar sus oportunidades. Quizá uno de los mejores ejemplos es el de Álvaro Ratón por la particular idiosincrasia que acompaña a la posición del portero. Un jugador que puede pasar meses sin ponerse los guantes pero debe estar siempre preparado para actuar de emergencia. En el caso del gallego, además, con la alargada sombra de Cristian Álvarez a la espalda. Pese a todo, el guardameta ha logrado asentarse en la portería y fue uno de los hombres importantes del Real Zaragoza frente al Rayo.
También Alberto Soro, que perdió su puesto en el once por un Álex Blanco que pasó por el partido sin pena ni gloria. Y de nuevo, el ejeano, en apenas un puñado de minutos, dejó muestra de calidad, incidiendo de forma decisiva en la victoria del equipo aragonés, asistiendo en la jugada que supondría el penalti sobre Luis Suárez y que podría haber sido incluso más importante de haber definido de mejor manera el mano a mano que tuvo frente a Dimitrievski.
Dos ejemplos diferentes pero que sirven para ilustrar el deseo de Víctor Fernández y que devuelven al imaginario blanquillo a la pretemporada y a deseo, por entonces, del técnico aragonés de contar con una plantilla a la que poder exigir el mejor nivel al menos, veinticinco partidos.