A sus 37 años, Leo Ponzio es todo un ejemplo en el mundo del fútbol. El capitán de River Plate se prepara para volver al trabajo tras el parón navideño y lo hace en su templo particular, un pequeño gimnasio en cuyas paredes cuelgan de cuadros varias camisetas con su nombre. La mayoría de ellas son del conjunto bonairense, alguna de la selección argentina, incluso de Newells Old Boys, pero hay una especial: la del Real Zaragoza con el '14' a la espalda.
— #LeoPonzio23🦁 (@PonzioLeon23) December 29, 2019
Ponzio jugó como blanquillo durante dos etapas. Llegó por primera vez a la capital aragonesa en el verano de 2003, tras dos temporadas rindiendo a un gran nivel en Newells, con el que debutó en la Superliga Argentina. Tras tres temporadas y media, en las que disputó un total de 142 partidos oficiales, con cinco goles en su cuenta personal; hizo las maletas para fichar por River Plate en enero de 2007.
Pero su primera aventura en el conjunto franjirrojo apenas duró tres temporadas y media. Fue entonces, en el mercado invernal de 2009, regresó al Real Zaragoza con la misión de devolver al equipo a LaLiga Santander, y así fue. Continuó dos temporadas más como blanquillo, con un total de 104 partidos, seis goles y tres asistencias; hasta que volvió a River Plate.
La actual es su novena de forma consecutiva en el cuadro bonairense, del que es capitán. Además, Ponzio se ha convertido en todo un ídolo de su afición, y es que desde su llegada ha logrado dos Copa Libertadores, una Copa Sudamericana, tres Recopa Sudamericana y una Copa Soruga Bank. Casi nada.