El mundo del fútbol vive en estos momentos todo un terremoto ante la obligación de disputar los encuentros a puerta cerrada. Sin embargo, no quedan atrás otros asuntos trascendentes para el deporte español, como es el llamado 'caso Oikos', cuyas investigaciones siguen adelante con novedades en las últimas horas.
Según informa el diario El Mundo, el juez que instruye el caso, el titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Huesca ha imputado a la totalidad de la plantilla del Reus, 26 futbolistas a los que se ha citado como investigados. Se confirma de esta manera que se advierten indicios de haber cobrado una prima por parte de la SD Huesca por ganar al Real Valladolid en la penúltima jornada de LaLiga en la temporada 2016/17.
El juez señala que se cita a los futbolistas como investigados por un delito tipificado en el artículo 286 del Código Penal, corrupción entre particulares. De esta manera, según indica el juez, las declaraciones se llevarán a cabo “en cuanto permita la agenda” y será a través de videoconferencia, teniendo en cuenta que los jugadores residen en diversas localidades de la geografía española. Se cita como investigado al que fuera jugador del conjunto oscense Íñigo López y a la propia SD Huesca, tanto por ese partido como por el de un año más tarde frente al Nàstic de Tarragona.
Cabe recordar que en aquella plantilla del Reus, dirigida entonces por Natxo González, que una campaña después sería entrenador del Real Zaragoza, se encontraban también los exjugadores del equipo blanquillo Alberto Benito y Ángel Martínez, así como el actual miembro de la plantilla aragonesa, el defensa Pichu Atienza.