La crisis provocada por el coronavirus ha supuesto toda una revolución para el mundo del fútbol. Con la actividad deportiva parada, los clubes tienen que buscar las fórmulas para tratar de paliar las afecciones económicas que esto supone. Una de las principales vías ante el descenso de ingresos sufrido está siendo acudir a los ERTES y acuerdos con los futbolistas, como ha anunciado el Real Zaragoza.
En el caso del club aragonés, según indica la propia nota de prensa emitida por el club, las negociaciones “se han resuelto con rapidez y prontitud, debido a la buena disposición de la plantilla y a su voluntad de brindar su colaboración en las actuales circunstancias”. De esta manera se relaja parcialmente la presión a la que estaba sometida la tesorería del Real Zaragoza. Aunque no ha trascendido el porcentaje exacto pactado, se estima que está cercano al 25% del salario de los futbolistas.
Una medida que se aplica también al resto de trabajadores de la entidad blanquilla y no únicamente a los jugadores. Entre otros, también se han visto afectados por la reducción de salarios algunos de los trabajadores de primer rango del Real Zaragoza, como el director general, Luis Carlos Cuartero o el director deportivo, Lalo Arantegui.
En cuanto al resto de los empleados del club, el ERTE alcanza a todos los trabajadores del Real Zaragoza, aunque en algunos casos de forma parcial. Es el caso de aquellos que no han pausado su actividad pese al parón de la competición, caso de los jefes de sección, preparadores físicos, jardineros, departamento de prensa o administración.