El Real Zaragoza ultima los preparativos para el primer encuentro de vuelta tras el parón por el coronavirus. El equipo aragonés se medirá con el Alcorcón en el estadio municipal de La Romareda y lo hará mermado por las bajas, especialmente en defensa. Además, otros futbolistas llegarán mermados, como en el caso de Burgui.
Fue uno de los últimos sustos protagonizados en los entrenamientos del equipo aragonés. El atacante, cedido por el Alavés, recibió un golpe en el talón que hizo presagiar lo peor. Sin embargo, parece que todo quedó en un susto y el extremeño podrá estar el sábado en el encuentro ante el equipo alfarero.
Apenas dos días para la vuelta a la competición en LaLiga SmartBank, como el propio jugador ha publicado en sus redes sociales, en las que ha mostrado cómo llevaba a cabo el tratamiento individualizado para la dolencia sufrida en el talón. En cualquier caso, las sensaciones mostradas por Burgui son de optimismo.
Un futbolista que antes del parón no pudo ayudar en exceso al equipo y que ahora, tras meses de readaptación, está llamado a ser una pieza importante en los plantes de Víctor Fernández de cara a conseguir el objetivo del ascenso.