Al problema puramente deportivo, con cuatro derrotas en los seis partidos disputados tras el parón, se le añaden los físicos. Kagawa no pudo estar a disposición de Víctor Fernández en Montilivi. El japonés ya viajó a Girona con ciertas molestias musculares y no pudo forzar para intentar ayudar a sus compañeros a sumar, aunque fuera, un punto.
Habrá a quien le extrañase que este pasado viernes no se viera a Kagawa sobre el césped de Montilivi. Sin embargo, la causa es esa: el japonés no pudo arriesgar con los problemas físicas que arrastraba. Quizás su aportación en el juego hubiera sido determinante para que el Real Zaragoza llegase a la meta de Riesgo, ya que únicamente realizó un tiro entre los tres palos. Fue un disparo desde fuera del área de Burgui en torno al minuto 20 de juego.
Esos problemas físicos le impidieron contar para Víctor Fernández en Monitilivi. Aunque el nipón luchará para estar en el choque vital frente al Rayo Vallecano de dentro de apenas 48 horas. Tras el parón, la figura de Kagawa parecía haber resurgido ya que ha sido titular en cuatro de los seis choques. Y tan solo no jugó frente al Girona.
Además, la ausencia de Luis Suárez por acumulación de tarjetas podría llevar de vuelta a la titularidad a Kagawa. Junto a Puado, algo más adelantado que habitualmente, de nueve puro, el japonés desempeñaría esa posición que conecta el medio del campo con la delantera. No obstante, serán Víctor Fernández y su cuerpo técnico quienes decidirán quiénes juegan en ausencia del cafetero.
Lo que está claro es que la afición le pide mucho más a Kagawa. El japonés vino para guiar al Real Zaragoza a LaLiga Santander con su fútbol, pero tan solo ha anotado tres goles y no parece haber conectado del todo con el juego que plantea el técnico sobre el verde. Su calidad es indudable y la afición espera que la saque a relucir en estas cinco últimas finales, y que sirva para ascender de manera directa.