Víctor Fernández mantuvo la idea de juego que ha presentado desde que se reanudara la competición en LaLiga SmartBank, pero en esta ocasión con nuevos nombres sobre el césped. El más llamativo, el del capitán, Alberto Zapater, que volvía a ser titular después de más de un año de ausencia.
Han sido concretamente 432 días los que ha tardado el ejeano en volver a ser de la partida desde el inicio. La última ocasión en la que había ocurrido había sido en la derrota por 0-1 frente al RC Deportivo en La Romareda, el 4 de mayo de 2019. Desde entonces, todo un calvario por culpa de la rodilla, que le obligó a operarse y a una larga rehabilitación que le mantuvo alejado tanto de sus compañeros como de su familia.
Pero Zapater se negó a rendirse y trabajó para volver. Cuando parecía cerca, entrando en la dinámica del grupo, llegó la pandemia, que frenó su progresión, pero le permitió entrar de nuevo en los planes de Víctor. El técnico lo usó en los últimos minutos de los partidos ante Alcorcón, Lugo y Extremadura para, en Tenerife, devolverle a la titularidad.
Sensaciones casi olvidadas para el aragonés, como admitía en rueda de prensa, “este año lo he estado analizando desde la grada, desde el banquillo y ahora jugando, ya ni me acordaba”. Quiso también el capitán mandar un mensaje de esperanza, “confío en el equipo, confío en que podemos ganar los tres partidos que quedan”. Y admitía que “estoy contento, feliz. La gente no sabe lo que hay detrás para poder estar apto. Que compañeros tuyos se alegren por ti es todo un reconocimiento. Tengo que dar gracias a mucha gente que es participe de que esto haya sido posible”, a lo que añadía que "con 35 años he tenido un cosquilleo como si tuviera 19 y estuviera debutando. Y eso es la hostia".