El Real Zaragoza ha logrado una victoria balsámica ante el Castellón en La Romareda. Tres puntos que han confirmado la permanencia del conjunto blanquillo en LaLiga SmartBank. Lo que parecía imposible hace unos meses, la salvación, llega con dos jornadas de antelación, y todo gracias a la llegada clave que fue la de JIM al banquillo zaragocista. Pero los inicios de la campaña para el Real Zaragoza fueron complicados.
El Real Zaragoza iniciaba una nueva temporada en la Segunda División Española de la mano del técnico Rubén Baraja y con una plantilla renovada. Con el transcurso de los primeros partidos parecía que los blanquillos podrían hacer algo serio en esta campaña, consiguiendo siete de nueve puntos posibles en los tres primeros partidos ligueros.
Pero a partir de la cuarta jornada todo se torcería. Un balance de tres empates y cuatro derrotas llevaría a los blanquillos a obtener un total de 10 puntos en 11 encuentros disputados. Estos número llevaron a la cesión de Rubén Baraja y a la búsqueda de un nuevo entrenador que dirigiera el rumbo del barco blanquillo.
Tras la salida de Baraja, la dirección técnica del Real Zaragoza decidió poner enfrente del banquillo zaragocista al técnico de la cantera, Iván Martínez. El prometedor entrenador de la Ciudad Deportiva tenía la difícil labor de resucitar a un equipo que encadenaba 12 jornadas sin ganar.
El paso de Iván Martínez por el primer equipo no fue lo esperado. Cinco derrotas en los cinco primeros choques ponían la duda en la decisión de no haber fichado un entrenador con más experiencia. Esto conllevo en el cese de Lalo Arantegui como director deportivo y el nombramiento en su lugar de Miguel Torrecilla. Con la salida de Iván más que clara, el técnico de la cantera consiguió un premio merecido y en su antepenúltimo partido como entrenador del primer equipo, el Real Zaragoza logró los tres puntos. El balance con Iván Martínez quedaba en tres puntos de 24 posibles, con el equipo en penúltimo lugar y con 13 puntos en su casillero.
El nuevo director deportivo, Miguel Torrecilla, traía al banquillo del Real Zaragoza al técnico Juan Ignacio Martínez. JIM llegaba a un equipo hundido y que se encontraba a cinco puntos de la salvación. A pesar de ello, el efecto JIM no tardaba en dar efecto y el equipo sacaba nueve de los doce puntos posibles en los cuatros primeros partidos del entrenador alicantino, logrando salir del descenso.
El equipo parecía otro distinto y peleaba los partidos con solo tres retoques en el mercado invernal. El central Peybernes, el punta Alegría y el centrocampista Sanabria reforzaban la plantilla del Real Zaragoza. A partir de la llegada de JIM, los blanquillos han cosechado un balance de diez derrotas, siete empates y cinco derrotas, siendo el tercer mejor equipo en este período tras Espanyol y Girona.
Con la victoria por tres a cero ante el Castellón, los muchachos de JIM logran el sufrido objetivo de la permanencia con dos jornadas aún por disputarse. De estar a cinco puntos de la salvación a estar salvados con seis puntos por disputarse. El efecto JIM.