El jugador Gaizka Larrazabal no podrá jugar el partido de la próxima jornada frente al Real Zaragoza en Lezama. El acuerdo de cesión con el Amorebieta incluía la denominada 'cláusula del miedo' que obliga al equipo vasco a abonar una cantidad de 25.000 euros para poder jugar frente al conjuntos aragonés.
Larra esta cuajando una gran temporada jugando 14 partidos, 13 de ellos como titular, también está ayudando al equipo con tres goles. Su actual entrenador, Íñigo Vélez de Mendizábal, ha dado con la tecla y le ha cambiado de extremo a carrilero. Una posición en la que el jugador vasco puede explotar su potencial físico y técnico.
El bilbaíno tiene contrato con el Real Zaragoza hasta 2023, por lo que una vez que concluya su cesión con el equipo "Amore" regresará como mínimo un año más a las filas zaragocistas.
La 'cláusula del miedo' era un método muy recurrido por el ex-director deportivo del Real Zaragoza, Lalo Arantegui. Así lo hizo con Lasure (Tenerife y Leganés) y Papu (Racing). El único cedido con el que no la llevo a cabo fue con Jorge Pombo (Cádiz), pero en su lugar adjuntó una opción de compra obligatoria de 1,25 millones, si el equipo gaditano ascendía a LaLiga, hecho que acabó sucediendo.
En la actualidad, Miguel Torrecilla ha aplicado esta cláusula y una cesión a un club de la misma categoría que el Real Zaragoza. Cabe recordar que los otros cedidos se encuentran en otras ligas o en equipos de categorías inferiores: Vuckic (Rijeka - croata), Baselga (Zamora), Bikoro (Hércules), Jannick Buyla (Nástic) y Marc Aguado (Andorra).
Los jugadores que están cedidos en el Real Zaragoza: Nano Mesa y Álvaro Giménez, ambos prestados del Cádiz, Borja Sainz, del Alavés, y Yánis, desde el Club del Este panameño; no tienen esta cláusula al pertenecer a otra categoría. La única posibilidad de un enfrentamiento sería en la Copa del Rey, donde el Cádiz o el Alavés acudirían a La Romareda para disputar la eliminatoria.
Que se lo queden y les regalo en el mismo lote Adrián,