Las sobradas de Piqué en el Zaragoza: "Dormía durante el día, me iba de fiesta a Barcelona y empalmaba para entrenar"

Gerard Piqué ha vuelto a Twitch y cada vez que lo hace, da mucho que hablar. Esta vez, no ha sido para menos. El futbolista del FC Barcelona ha conversado con el streamer Jordi Wild durante más de dos horas. Diálogo que ha centrado la atención de los aficionados al fútbol, también los del Real Zaragoza, donde el catalán jugó durante una temporada, la cual ha ocupado buena parte de la conversación, en la que Piqué ha desvelado algunas anécdotas de lo más picantes durante su etapa en La Romareda.

"Venía de Manchester, de dos años pasándolo mal, y llego a España, no a Barcelona, pero más o menos. Zaragoza está a unas 2 horas y 20 en coche y ese trayecto de los Monegros me lo sé de memoria. Todos mis amigos vivían en Barcelona y llevaba dos años sin verlos, estaban ahí al lado, metiéndole un poco al acelerador... de la DGT mejor ni hablemos. Había semanas que era dormir durante el día, por la noche ir a Barcelona, salir de fiesta y volvía sin dormir, entrenaba y dormía por la tarde. A veces pasaron cosas... la gente que me conoce dice 'la flor de Piqué', siempre tengo esa suerte, pero una vez dejé un coche siniestro en la Ronda de Dalt, quise engañar a un policía y le dije que se me había cruzado un seat, pero se dio cuenta de que me había quedado dormido", comenzaba Piqué, abriendo el telón a una serie de anécdotas que no pasarán desapercibidas.

"Me pasaron 1.000 cosas en mi año en Zaragoza, con Víctor Fernández también, que era el entrenador. Era otra época, ya está todo prescrito. Una noche salimos en la Bikini, yo tenía una habitación para dormir 1 o 2 horas y acabé a las 6 de la mañana. Me puse a calcular, pero al final me quedo dormido y me despierto a las 9, y el entreno es a las 11, pero tienes que llegar a las 10. Bueno da igual, me cae multa, pero al entreno puedo llegar derrapando. Total que salgo pitando, bajo a recepción, tiro las tarjetas de crédito para que me cobren, llego al parking y no tengo las llaves del coche, las había perdido en la Bikini. Su puta madre.

Tengo que ir al concesionario, me dan unas llaves nuevas a las 2 horas. Total, que llego tarde y el equipo ya ha entrenado. No sé qué excusa le dije al míster, que si mi novia estaba embarazada y ni tenía novia, que había tenido que ir al hospital en Barcelona. Llegó allí y Víctor Fernández me dice 'no tengo porque no creerte pero no te creo', 3 negaciones de golpe. Me puso a correr y esa sensación que empiezas a sudar y el pelo te huele a humo... Me dejó sin convocar mucho tiempo".

Más recuerdos como blanquillo

"En esa época, Sergio y Gaby Milito eran los centrales, y eran muy buenos. En la jornada cuatro, Sergio falla y debuto con Gaby contra el Villarreal, perdemos, pero meto un gol. Ese día expulsan a Milito y me toca jugar contra el Levante en casa. Ese mismo jueves, entre ambos partidos, salgo de fiesta con varios jugadores del equipo por Zaragoza. Allí hace mucho frío y yo iba en manga corta, se me bajan las defensas y el viernes/sábado con unas anginas de caballo, 39 de fiebre. Pero yo me dije, ya que lo has hecho, cómete las consecuencias, te tienes que recuperar y jugar porque es un partido muy importante para mí.

El Levante bajó ese año, era una banda, y a la media parte íbamos 0-2 perdiendo en La Romareda, la gente silbando. Yo no es que me encontrara mal, es que era una sensación de que me voy a morir. Le digo al míster que no puedo más y me cambia. Tenía 40 de fiebre y un frío, y hacía calor... Me llevé 45 minutos en el jacuzzi, no podía salir. Al final lo hice porque el equipo estaba jugando e iban a decir que este tío es un jeta. No sé cómo llegué a casa, y al día siguiente me iba a Madrid con Zapater para irnos a los JJOO con la sub 21. No pude jugar los clasificatorios y a la vuelta, Víctor me dijo que se había enterado que había salido de fiesta y que eso no era profesional. Estuve 1 o 2 meses sin apenas jugar".

El gran aprendizaje de Piqué en Zaragoza

"Fue un año en el que aprendí mucho, aparte de liarla parda. Así fue mi primer medio año, pero luego desperté. Recuerdo que Víctor me puso de lateral contra el Real Madrid en el Bernabéu. Tenía que marcar a Reyes y me lo estaba comiendo, pero a la media hora me ponen a Robinho. Me empieza a hacer bicicletas y nada, me sacó la amarilla a los 2 minutos. Me defendí bien, perdimos 1-0 pero me acuerdo de ese partido porque te hace mucha ilusión en ese momento. Estás viviendo el sueño que siempre habías querido, pero siempre he querido tener mi parte de juventud que vivía cualquier chaval normal y corriente".