23 de abril de 1993: el partido que une a Los Magníficos con la Recopa
Son días de recuerdo en el Real Zaragoza. Ante un presente poco alentador, las mentes de los aficionados blanquillos optan por viajar al pasado en busca de momentos mejores escondidos en la memoria.
Más si cabe con la consecución de acontecimientos de estas jornadas. De la despedida multitudinaria al mito José Luis Violeta, a la celebración de la consecución de la Recopa, que cumple ya 27 años de edad.
27 años desde que el Real Zaragoza se convirtiera en leyenda en la noche de París gracias a Nayim. Un gol instalado en la memoria colectiva de un país que gritó al unísono al ver aquel balón bajar del cielo del Parque de los Príncipes para colarse en la portería de un incrédulo Seaman.
El Real Zaragoza de Los Magníficos y el de la Recopa
Aquella Recopa suponía el segundo título europeo en la historia del Real Zaragoza. El primero se había logrado en 1964, la Copa de Ferias, por el equipo conocido como el de los cinco Magníficos –Santos, Villa, Lapetra, Canario y Marcelino– en el que también estaba, entre otros, un joven José Luis Violeta de apenas 22 años.
Las dos generaciones más importantes de los 90 años de vida del club aragonés que confluyeron en una jornada de San Jorge, en 1993. Aquel día se rindió homenaje a Los Magníficos, que saltaron al césped de La Romareda para recibir la ovación de la afición blanquilla y para realizar el saque de honor del partido.
No sería un encuentro cualquiera. Fue un amistoso frente al Tottenham, enemigo acérrimo del Arsenal (rival en la final de la Recopa) y en el que militaba Mohamed Ali Amar, más conocido por Nayim. Aquella sería la primera toma de contacto del ceutí con La Romareda, pues por entonces su fichaje ya estaba prácticamente hecho con el Real Zaragoza. En sus propias palabras “cerrado verbalmente, que es lo más importante”. Debutaría de blanquillo dos meses después, el 30 de mayo, frente al Valencia, 2-1, también en el coliseo zaragozano.
El choque no tendría mucha más historia. Los locales se impusieron por 2-0 con buenos goles de Poyet y Solana. Ambos conjuntos mezclaron titulares y suplentes, entre otros, el Real Zaragoza formó con el portero José Ramón Bermell y con Manuel Peña, como exponentes de los menos habituales del momento (también jugaron Sánchez Broto,Lizarralde, Sergi, Juliá, Aguado, Solana, Esteban, García Sanjuán, Belsué, Darío Franco, Aragón, Poyet, Higuera, Peña y Moisés).
En el anecdotario del choque, dos hechos reseñables. Paul Allen, jugador del equipo inglés fue sustituido y devuelto al campo al no tener el Tottenham suplentes suficientes. Además, el choque no fue dirigido desde el banquillo por Víctor Fernández en el equipo aragonés, pues sufrió esos días una apendicitis que dejó a Manolo Nieves como hombre fuerte en el banquillo.