Tomás Alarcón y el peligro de la inactividad

El entrenamiento del jueves del Real Zaragoza contó con una baja inesperada. Fue la de Tomás Alarcón, que trabajó en el gimnasio junto a los lesionados. Una mera precaución para que el chileno pueda llegar en las mejores condiciones al partido frente al Mirandés del próximo domingo en La Romareda.

Se trataba únicamente de un reparto de cargas, después de jornadas intensas de trabajo para el centrocampista durante las últimas semanas, desde su llegada a la capital del Ebro. Una exigencia que se sumó a la falta de actividad de Alarcón durante la presente temporada, en la que apenas había contado con minutos en el Cádiz.

Por varias razones, Tomás Alarcón no se ha vestido de corto desde hace semanas en partido oficial. En LaLiga Santander su última aparición data del 10 de septiembre, cuando jugó media hora frente al FC Barcelona. En Copa del Rey, disputó medio partido en la derrota frente al Real Unión, a mediados de noviembre.

A ello se le suma el parón por el Mundial de los equipos de la máxima categoría, un tiempo, eso sí, en el que Alarcón pudo jugar varios amistosos con el cuadro gaditano. Fue autor del último gol de la victoria cadista ante el Manchester United y también participó en los choques frente al Wolverhampton y el Xerez.

Ahora, en el Real Zaragoza, Tomás Alarcón está llamado a volver a acumular muchos minutos de juego, como hizo siempre en O’Higgins, su club de origen en Chile y también en su primera temporada en España, a su llegada a Cádiz.