El Real Zaragoza ha iniciado la segunda semana de entrenamientos de pretemporada. Al equipo aragonés todavía le quedan días de trabajo en sus instalaciones, la Ciudad Deportiva, antes de emprender viaje hacia San Pedro del Pinatar, Murcia.
La primera semana se saldó con buenas sensaciones, tras la llegada de los nuevos fichajes y sin ningún susto, típicos en los primeros días de trabajo. El único contratiempo sufrido por el cuadro blanquillo fue la fuerte tormenta que afectó a la ciudad de Zaragoza y que también llegó a las instalaciones de la carretera de Valencia, alterando los planes del cuerpo técnico.
Más allá de suspender un entrenamiento y provocar el cambio de campo de cara a las últimas sesiones de la pasada semana, llegando incluso a trabajar en uno de los campos de césped artificial, la Ciudad Deportiva se recupera todavía de las afecciones provocadas por la tromba de agua.
Han sido numerosos los daños sufridos en las instalaciones del Real Zaragoza, que se dejan notar desde antes incluso de llegar a las mismas. La señalización que marca el camino de entrada se encuentra todavía enfangada, marcando la altura a la que llegó el agua. Ya dentro de la Ciudad Deportiva son varios los árboles caídos e incluso una de las vallas que perimetran el campo de entrenamiento. Afecciones que, por suerte, no causaron daños personales, pero que afectan, al menos levemente, al día a día del plantel zaragocista.