Como se ha demostrado en el terreno de juego y como ha ido comentando el propio Víctor Fernández en las ruedas de prensa, el fútbol del Real Zaragoza empieza a ser cada vez mejor y a parecerse más y más a la idea de jugar que quiere imponer el técnico aragonés. En los últimos partidos, el entrenador zaragocista ha salido con un nuevo esquema que ha potenciado a algunos futbolistas y que, hasta el momento, ha dado buenos resultados.
El 1-3-4-1-2 con el que sorprendió Víctor en El Alcoraz parece que ha llegado para quedarse. Además de buen fútbol, una victoria en el derbi y un empate ante el líder, este dibujo ha traído consigo una sociedad que hace disfrutar y mucho al Real Zaragoza. Toni Moya y Marc Aguado han recogido el guante que les ha dejado su entrenador desde que llegó y están siendo valientes y atrevidos con la pelota.
El '21' y el '8' del Real Zaragoza han conseguido coger la batuta del equipo y están deslumbrando en los últimos choques. Ambos mediocentros son los encargados de manejar el juego y marcar el ritmo de los suyos y ante la SD Huesca y CD Leganés lo hicieron de manera notable. Algo que no solo se nota exclusivamente con el balón en los pies, sino también en el plano mental: es obvio que ambos jugadores han adquirido un papel de peso y se sienten importantes. Marc Aguado fue uno de los destacados en el derbi y Toni Moya fue el mejor ante el líder.
Tras una buena primera mitad, Marc Aguado tuvo que ser sustituido en el descanso el pasado sábado por unas molestias en el aductor. El canterano será sometido a pruebas para ver el alcance de estos problemas y saber si podrá volver a jugar ante el Burgos junto al extremeño o por el contrario deberá descansar por algún tiempo.