El Real Zaragoza se juega mucho en su visita a la UD Almería. El cuadro que dirige, al menos de momento, Miguel Ángel Ramírez, se mide al conjunto indálico con la necesidad de sumar puntos y alejarse del descenso. La trayectoria del técnico grancanario se resume en un triunfo en nueve partidos, y el décimo bien podría ser el último si no logra ganar en el Estadio de los Juegos Mediterráneos. Así pues, la plantilla aterrizaba en esta misma mañana de sábado en la ciudad andaluza, y las caras de los jugadores dejaban muy claro que la situación es sumamente delicada.
Y es que, en las imágenes y el vídeo que compartía el Real Zaragoza en sus redes sociales, se ha podido ver a los jugadores con rostro serio en su llegada a Almería. Bien por la concentración de cara al encuentro, bien porque se han tenido que pegar el madrugón, o bien porque son conscientes de que el equipo se juega mucho, especialmente su entrenador, las caras de la plantilla no eran de muchos amigos precisamente. Apenas Francho Serrano esbozaba una leve sonrisa mientras charlaba con Gaetan Poussin.
📍Ya estamos en Almería 🛩️ pic.twitter.com/fm44jaq5U3
— Real Zaragoza (@RealZaragoza) March 15, 2025
Así las cosas, el Real Zaragoza visita a un equipo que, a su manera, también está sumamente necesitado de puntos. Y es que si bien el Almería ha ostentado el liderato de la clasificación durante la mayor parte del campeonato, sus resultados de los últimos dos meses han propiciado que se desplome en la tabla. Tanto es así que ahora mismo incluso están fuera de los puestos de play off de ascenso. Si tenemos en cuenta el presupuesto, los jugadores e incluso el entrenador, podemos afirmar a todas luces que esta es una situación extraña para el equipo que dirige Joan Francesc Ferrer, Rubi.
Miguel Angel Ramírez, entrenador del Real Zaragoza, ha señalado, ante la cita de este próximo sábado contra el Almería, que no se plantea su posible destitución por el club en caso de una derrota porque no es algo que le preocupe en estos momentos.
"A mí lo que preocupa no es mi puesto de trabajo sino que el Real Zaragoza esté mejor deportivamente. Me ocupo, no me preocupo. Trato de intentar ayudar para que el equipo vaya mejor. Lo que pase conmigo el tiempo dirá. Lo que me preocupa es el equipo. No me lo planteo porque no es algo que me preocupe ahora mismo", ha asegurado en rueda de prensa.
El técnico 'blanquillo' ha explicado que si se analizan los partidos de su equipo se ve que no está siendo dominado ni superado con muchas ocasiones de los rivales sino que el tema es que las pocas opciones que tienen de marcar los oponentes las están transformando.
"Hay un elemento emocional en eso. Cuando eres capaz de competir, y de jugar bien pero en ciertos momentos hay apagones seguramente es algo más que táctico o técnico. En eso hay que trabajar para ser más consistentes y fiables", ha analizado.
Igualmente ha apuntado que la relativa facilidad con la que el equipo encaja goles no es un problema de los defensas sino que es "de todos, desde la primera línea hasta la última". "No podemos caer en el error de decir que es esta línea o esta posición porque entonces estaríamos fallando", ha asegurado.