Es Noticia

Un error garrafal de Gil Manzano acaba con el sueño copero del Decano (2-3)

Un garrafal error del colegiado Jesús Gil Manzano fue decisivo en la derrota del Recre. (Manu López / Albiazules.es).
E.Muñoz

Un error dantesco, evitable y doloroso del árbitro extremeño Gil Manzano acabó con el sueño copero del Recreativo. CA Osasuna pasa a octavos de final tras voltear un 2-0 en contra y marcar el gol de la victoria a pocos minutos del final de la prórroga.

Los onubenses lo dieron todo en cada acción, ofrecieron su mejor versión de la temporada en los primeros 45 minutos de partido y merecieron pasar la eliminatoria.

El Decano fue superior a Osasuna cuando le jugó de tú a tú, sin miedos y sin complejos. El ciclón albiazul encerró a todo un equipo de LaLiga Santander y lo llevó al extremo. Morcillo puso el 1-0 con un certero disparo al encontrarse un balón dentro del área. No falló. Antes había perdonado Alberto Quiles.

Los rojillos sufrieron y apenas logró llegar con claridad a la portería defendida por Álex Lázaro. Sólo un disparo de Íñigo Pérez que se marchó por encima del larguero.

Mientras tanto, el Recre superaba a Osasuna en las jugadas a balón parado. Justo antes de llegar al descanso, tras un barullo en el área, Roncaglia no acertó en despejar un balón y se lo terminó metiendo. Era el segundo gol del Recre y la afición se frotaba los ojos. Un Segunda B tenía entre las cuerdas a un Primera.

Tras la reanudación, Osasuna mejoró su imagen a raíz de un triple cambio. La entrada de Chimy Ávila revolucionó el partido. De menos a más hasta asfixiar al Recre, que esperó su oportunidad a la contra.

De hecho, los onubenses gozaron de alguna que otra ocasión para firmar el 3-0, pero no pudo ser. Isi Ros la tuvo en sus botas.

Y de la posible sentencia al 2-1. Darko Brasanac cabeceó a la perfección un balón centrado desde la banda izquierda. Faltaban quince minutos para el final.

La movilidad de Chimy Ávila mantuvo en jaque a la defensa recreativista. El equipo dio, además, un notable bajón físico. Hasta que llegó la jugada decisiva del partido. Chimy Ávila empujó a Morcillo cuando éste iba a despejar. El balón quedó muerto y el argentino hizo el 2-2. Aquel gol abocó a los onubenses a que fueran a la prórroga.

Allí todo fue más difícil. Pese a que el Recre aguantó, el Osasuna sentenció. Chuli falló una clara ocasión e Íñigo Pérez no perdonó. Disparó a la escuadra y despidió al Decano de la Copa del Rey.

Gritos de "manos arriba, esto es un atraco" de la parroquia albiazul pero la realidad es que el Decano cae eliminado.

Escribir comentario 0 comentarios
Deja una respuesta
Su comentario se ha enviado correctamente.
Su comentario no se ha podido enviar. Por favor, revise los campos.

Cancelar