Mestalla guardó hoy, antes del inicio del encuentro Valencia-Eibar, un minuto de silencio en homenaje al recientemente fallecido Quique Martín, que fue portero de los locales y pasó a la historia por una fotografía subido al larguero de una de las porterías de Chamartín tras la final de la Copa de 1954.En el fondo sur del estadio, en la zona ocupada por la Curva Nord, se desplegó una pancarta gigante con esa foto, tomada tras el triunfo del Valencia por 3-0 ante el Barcelona, y con el lema 'Para llegar aquí arriba hay que dejárselos ahí abajo'.
Nacido en Valladolid en 1924, se estrenó en Primera con el Castellón y jugó siete campañas en el Barcelona antes de fichar por el Valencia, en el que estuvo seis temporadas antes de colgar los guantes en el Levante, al que dirigió desde el banquillo y al que condujo a su primer ascenso a Primera.
El minuto de silencio se hizo extensivo también a todas las víctimas del terremoto que el pasado lunes asoló Ecuador. EFE.