La selección española sub 21 logró este domingo proclamarse por quinta vez campeona de Europa de la categoría ante Alemania. A pesar de comenzar la competición recibiendo un duro correctivo ante Italia, el grupo se levantó, acabó levantando la copa... y consagrándose en la élite como base de la próxima convocatoria de España para la Eurocopa 2020.
Con nombres aún por madurar, el equipo dirigido por Luis de la Fuente aportará -a buen seguro- un buen número de nombres a la que será la selección que pujará por hacerse con la Euro absoluta el próximo verano.
Sin varita mágica, jugadores como Dani Ceballos, Fabián Ruiz, Dani Olmo, Oyarzabal o Junior Firpo están llamados a ser parte importante de la absoluta pronto e incluso algunos, como es el caso del sevillano, ya eran pieza fundamental con Luis Enrique hasta hace pocos meses.
Una de las posiciones que más ha sufrido durante los últimos años en la selección española ha sido la del central. Tras el adiós de Puyol, Piqué y Ramos prometían ser pareja de futuro, pero con la retirada del actual jugador del Barça, el sevillano ha quedado huérfano.
Muchas son las pruebas realizadas durante las últimas concentraciones e incluso jugadores como Diego Llorente o Sergi Gómez han sido llamados por Luis Enrique para conocer su nivel.
El papel de Unai Núñez o de Jesús Vallejo -inmensos durante la final- les permite volver a colocarse en el cartel y pujar por tener un hueco en la nueva selección de Robert Moreno.
La base de España para la Eurocopa 2020 llega fuerte, llega instalada en la élite.